Vecinos de Mar Chiquita denuncian que el propio municipio extrae arena de las playas públicas y las traslada a un corralón privado ubicado en la localidad de General Pirán, siendo esta una maniobra prohibida y penada por la legislación de la provincia de Buenos Aires.
Esta mañana, vecinos de la zona pudieron fotografiar el momento en el cual al menos dos camiones extraían varias toneladas de arena de una playa, para luego seguir el recorrido de los vehículos y sorprenderse que la arena era descargada en un corralón privado.
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Pero el dato más llamativo y el cual volvió a alarmar a parte de la comunidad de Mar Chiquita, es que los camiones utilizados eran del municipio que conduce Jorge Paredi (Frente de Todos).
No es la primera vez que la gestión queda expuesta ante temas ambientales, luego de que el HCD local aprobara una polémica ordenanza que permite fumigar a tan solo 150 metros de la población y el propio intendente la apoyara. Además, el municipio quedó en la mira por la construcción de un barrio privado en una reserva natural, hecho que se encuentra paralizado por una medida cautelar de la justicia.
“Me asomé por la ventana y vi a los camiones entrar. Seguí los camiones y luego me comuniqué con otro testigo que afirma que los descargaban en este lugar. Creo que a esto lo venían haciendo desde hace tiempo, solo que ahora nos enteramos”, le contó a este portal, un vecino que fue testigo del hecho.
El corralón mencionado lleva el nombre de “Materiales Villagra”, y se encuentra ubicado en la calle 25 de mayo al 600, en la localidad de Pirán, perteneciente al Partido de Mar Chiquita.
La población que vive cerca de la costa asegura que el robo de arena ha sido sistemático durante décadas, pero que ahora se encuentra rechazado por gran parte de los vecinos y ambientalistas del lugar.
Los expertos sostienen que la extracción descontrolada de arena en las playas puede tener severas consecuencias, como una mayor pérdida de biodiversidad y consecuencias “hidrológicas”, es decir alteraciones de los ciclos de mareas.
Al margen de esto, todavía no se sabe a ciencia cierta si la arena extraída es parte de una venta directa entre el municipio y el corralón, o es directamente una maniobra clandestina.
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