La Cámara de Diputados comenzó la maratónica sesión que culminará el domingo a la mañana con la media sanción a la reforme del Impuesto a las Ganancias. Se espera que el tratamiento de este tema comience después de las 19 horas. Antes tuvieron lugar los apartamientos de reglamento, homenajes y cuestiones de privilegio. Igualmente, la apertura de la jornada contó con cruces y chicanas entre oficialistas y opositores.
Un rato antes de las 12 el titular del Cámara baja abrió la sesión. El oficialismo alcanzó el quórum con los propios y algunos pocos aliados. Ni el lavagnismo, ni Juntos por el Cambio aportó a este número. “Devolución de favores”, señalaban voceros de este espacio recordando que el Frente de Todos no los acompañó el jueves cuando intentaron sesionar.
TE PUEDE INTERESAR
Los principales temas que los diputados debaten ante del comienzo del tratamiento de Ganancias son las denuncias por los derechos humanos en Formosa, la llegada de las vacunas, la ley de trazabilidad, los reclamos de interpelación de la ministra Carla Vizzotti y y el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y el pedido de tratar la ley de Incendios aprobada por Senado sobre tablas.
La jornada comenzó con la renuncia de Martín Soria a su banca en la Cámara baja. Los diputados levantaron la mano y el próximo ministro de Justicia, que asumirá el cargo el lunes, se fue entre aplausos, alientos y deseos de éxitos de parte de sus ex compañeros de bloque. El jueves por la tarde estuvo reunido varias horas con Sergio Massa “para definir el esquema de su salida y conversar sobre su gestión”, informaron fuentes parlamentarias a INFOCIELO.
En el comienzo del debate hubo cruces y chicanas entre oficialistas y opositores. “Necesitamos que nos explique qué piensan hacer para enfrentar la segunda ola y los detalles del plan de vacunación que lleva adelante el Gobierno nacional”, reclamó la vice de la comisión de Salud, Carmen Polledo (PRO). Por su parte, Mónica Frade (Coalición Cívica), que llevaba una careta de Gildo Infrán en su banca, reclamó contra Massa: “Usted Presidente es el primero que ha guardado silencio. Que se jactaba en 2015 diciendo que iban a cambiar la corrupción del presente por la transparencia del futuro”.
Muy enojada, y a los gritos desde su banca, la vice jefa del bloque Frente de Todos, Cecilia Moreau, gritó: “Es una vergüenza. Un legislador no tiene por qué darle explicaciones. Usted va a Formosa porque por Quilmes no puede caminar”. En cuanto a los planteos sanitarios, el encargado en responder fue el tucumano Pablo Yedlin, titular de la comisión de Salud. “Hay un intento de un grupo de la oposición de generar ruido permanente en todas las decisiones sanitarias con un objetivo electoral“, señaló y pidió “dejar la vacuna por fuera de la grieta para enfrentar la segunda ola”.
Todavía quedan varias horas con apartaciones de reglamento y cuestiones de privilegio. Se espera que después de las 19 comience a tratarse el debate. Antes de Ganancias tendrá media sanción la reforma del régimen del monotributo, el proyecto de Educación ambiental y una modificación al reglamento del doping en prácticas deportivas. Fuentes parlamentarias adelantaron que en estos temas solo hablarán los miembros informantes, “para agilizar la sesión”, según definieron en la reunión de Labor Parlamentaria. En tanto, para Ganancias están anotados como oradores 50 diputados oficialistas y 30 de Juntos por el Cambio, sumado a legisladores de otros bloques.
En el trascurso de la tarde en el Salón de los Pasos Perdidos el diputado por la Ciudad de Buenos Aires Facundo Suárez Lastra (UCR) anunció que no iba a votar a favor, como lo hará, según ya anunciaron, la mayoría de su bancada. “El proyecto es malo, procura resolver un problema y lo hace muy mal”, justificó. Sin embargo, no es el único desencantado. También lo están algunos del oficialismo.
Uno de estos diputados reconoció en diálogo con INFOCIELO que “este proyecto no arranca por los últimos para llegar a todos, como dice el Gobierno”. “No es un proyecto que me guste defender. Estoy anotado para hablar, pero si me bajan no tengo problema”, agregó. Pero también reconoció que “es una gran jugada política”. “Beneficia a casi dos millones de trabajadores por gasto fiscal relativamente bajo. Son 48 mil millones de pesos en un año, cada IFE son 90 mil millones de pesos en un mes”.
Como ya adelantó este portal, se espera que antes de la votación en Diputados se incluyan algunos cambios propuestos desde el comando oficialista pero en el Senado. Comenzada la sesión, Massa se refugió en su despacho y los siguió analizando con calculadora en mano. Tienen en cuenta que “la frazada es corta, pero un es una buena posibilidad para beneficiar a la mayor cantidad de trabajadores”.
Frente a este escenario, la Cámara baja mañana antes del mediodía avanzará con la media sanción con un amplio consenso político y el lunes el texto llegará al Senado. Al día siguiente la comisión de Presupuesto y Hacienda comenzará a debatir este tema. Según anunció el jefe de la bancada oficialista, José Mayans, esta mañana “en la primera semana de abril” la Cámara alta convertirá en ley el proyecto. “Tenemos siete días para girarlo al pleno de la Cámara y en el Senado contamos con los votos para convertir en ley el proyecto. Se trata de fortalecer el salario del trabajador”, completó.
TE PUEDE INTERESAR