Luego de sufrir un accidente doméstico mientras cargaba a su flamante perra Rita, Susana Giménez fue internada de urgencia este viernes en el sanatorio Cantegril de la ciudad de Maldonado, en Uruguay, donde pasa la cuarentena obligatoria. Mientras tanto, desde Argentina, fue intimada a pagar los aportes sindicales de su chofer mediante una carta documento.
Según informó minutos atrás en América TV el director del centro médico, Elvio Paolillo, la “diva de los teléfonos” debió ser hospitalizada con una luxación en el codo izquierdo. “Ya se encuentra bien, va a tener los controles que necesita y lo más probable es que esto sea una anécdota”, detalló el médico.
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La conductora televisiva viajó al país vecino junto a su hermano Patricio en un vuelo privado el último sábado desde Buenos Aires. La decisión generó una gran controversia mediática en medio de la emergencia sanitaria, a pesar de que la artista aclaró que contaba con los permisos necesarios para viajar.
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Intimada por el Sindicato de Choferes
La caída de esta mañana no fue el único revés que sufrió Susana: a través de una carta documento, fue intimada a pagar $ 3.600.220 por no haber realizado “las retenciones y depósitos de los aportes sindicales y la contribución solidaria a favor del Sindicato de Choferes Particulares” durante los últimos cinco años.
Según publicó hoy Mundo Gremial, la entidad argumenta que la conductora violó las disposiciones del Convenio Colectivo de Trabajo 709/15 que rige la actividad y reclama el 4% de la remuneración que Marcelo Ahumada, su chofer, cobra por sus servicios. El texto lleva la firma de la secretaria general, Elba Andrea Aranda.
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