El 13 de septiembre se celebra el Día Mundial del Chocolate, uno de los placeres más compartidos por todos. En un postre después de almorzar o cenar, en una torta de un cumpleaños, o en un regalo, el chocolate es siempre bien recibido por la mayoría de las personas. Y hasta tiene su día. Te contamos por qué.
Desde el año 1995, cada 13 de septiembre se celebra en el mundo el chocolate en honor de Roald Dahl, el escritor y creador de la novela infantil Charly y la Fábrica de Chocolate, que luego fue llevada al cine en más de una oportunidad convirtiéndose en un clásico, que las nuevas generaciones recuerdan más que nada por la versión de 2005 de Tim Burton, protagonizada por Johnny Deep.
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Otro de los homenajeados en esta fecha es Milton S. Hershey, creador de Hershey Chocolate Company, la empresa más grande de chocolate de Estados Unidos, que también nació este día. En otras regiones de Latinoamérica se celebra el día 7 de julio, ya que se toma en cuenta la fecha en que el cacao llegó a Europa desde América, donde tiene su orígen.
¿Cuál es el origen del chocolate?
Fue en Sudamérica que los pobladores de la Amazonia descubrieron cómo procesar los granos de cacao: los mayas lo cultivaban y los aztecas fueron perfeccionándolo. Sin embargo, hay una leyenda que dice que el chocolate tiene orígen en México.
Según esta leyenda, el dios llamado Quetzalcoatl le regaló un árbol de cacao a los hombres, que recibió el nombre de Theobroma Cacao, que significa alimento de los dioses. Lo cierto es que durante la época precolombina, estas civilizaciones de América Latina consumían bebidas a partir de la semilla de cacao y especias. En ese momento, además, el cacao funcionaba como moneda de cambio.
Cuando los españoles irrumpieron en América, los pueblos les ofrecieron el cacao. Rápidamente, el chocolate se convirtió en un bien de lujo, que no solo tenía un gran valor monetario, sino que llegaba solo por contrabando. Fue recién en la Revolución Industrial que la fabricación del chocolate creció y su consumo pudo popularizarse.
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