El ahora vocero libertario, Manuel Adorni, está siendo atrapado en las redes de su propio pasado. Porque el neolibertario hace 4 años quiso dedicarse a ser sindicalista. El expediente filtrado y dado a conocer por el sitio “Infogremiales”, revela su frustrado intento de incursionar como gremialista.
Sucedió en el intento llamado “Sindicato Argentino de Empleados de Delivery y Afines (SAEDA)”, en el año 2020. ¿Quién lo hubiera imaginado? El hombre que posteriormente se convirtió en panelista de La Nación+ y portavoz del gobierno libertario de Javier Milei, antes soñaba con liderar a los trabajadores de la mensajería.
¡MANUEL ADORNI CONDUCCIÓN!
El SAEDA, uno de los múltiples intentos de los trabajadores del rubro, presentó su documentación para obtener la inscripción gremial. En ella, Adorni figuraba como Secretario Adjunto de la nueva organización. Sin embargo, la trama se complica: 86 afiliados, todos registrados con la misma letra, y 36 de ellos observados por el entonces Ministerio de Trabajo de la Nación. Además, por declaración jurada, afirmaron no poseer bienes, patrimonio ni empleados. ¿Una pesadilla para el discurso libertario? Sin duda.
El estatuto oficial del SAEDA, fundado el 17 de diciembre de 2019, pretendía agrupar a los trabajadores que prestan servicios en el mundo del delivery. Desde autos y motos hasta bicicletas y monopatines, todos bajo el paraguas sindical. Aunque solicitaban ámbito de actuación en todo el territorio nacional, la mayoría de las 86 adhesiones tenían su pertenencia en territorio porteño. ¿Una estrategia o una debilidad?
Pero, ¿por qué ocultar el expediente? Desde que Adorni asumió como responsable de la comunicación oficial, la orden fue clara: pisar el expediente y evitar que llegue a manos de la prensa. Sandra Pettovello y Julio Cordero, responsables de Trabajo, no lograron contener la situación.
Algunos sugieren que las decisiones no se toman en los pasillos de Alem, sino que responden a referentes de Cambiemos que aún mueven los hilos. La incapacidad para manejar la situación de ambos fue evidente.
¡SUÉLTAME PASADO!
En este juego de poder, Liliana Archimbal, abogada que integró el equipo de Jorge Triaca en su paso por Trabajo en la era macrista, emerge como número 2 de la Secretaría actual.
Su influencia persiste, incluso en la gestión libertaria. La filtración del “Expediente Adorni” llega en un momento de alta exposición de Trabajo, con tensiones internas y amenazas veladas. ¿Quién dijo que las bases libertarias no tenía contradicciones dignas de la vieja política?