Julieta Silva, la mujer que fue condenada por atropellar y asesinar a su novio, el rugbier Genaro Fortunato, a la salida de un bar en 2017, fue imputada y detenida por ejercer violencia contra su actual esposo.
De acuerdo al comunicado emitido por el Ministerio Público Fiscal de Mendoza, la víctima radicó una denuncia por agresiones contra Silva, con quien tiene una hija de un año y está casado.
En este contexto, la sospechosa quedó detenida con prisión domiciliaria y monitoreada con una tobillera electrónica, a cargo del cuidado de la menor, al tiempo que se la Justicia la notificó de la imputación en su contra por el delito de “lesiones agravadas por el vínculo”.
El escrito sostiene que la Policía concurrió a la vivienda del marido y corroboraron la existencia de lesiones (una escoriación y una tumefacción), por lo que se le impuso una restricción de acercamiento a la acusada mientras se aguardan la toma de testimonios y los análisis solicitados al Cuerpo Médico Forense.
A su vez, Silva radicó una denuncia en la Unidad Fiscal de Violencia de Género, que fue incorporada al expediente en curso, añadió el comunicado.
El crimen del rugbier
El 9 de septiembre de 2017, Silva, de 36 años, embistió y asesinó a Genaro Fortunato, a la salida de un lugar conocido como “La Mona Bar” en la ciudad mendocina de San Rafael. El muchacho de 25 años falleció como consecuencia de un aplastamiento de cráneo, según reveló la autopsia.