Axel Kicillof dedicó un tramo importante de su discurso de apertura de sesiones a las políticas en materia de obra pública . En particular, reivindicó la decisión de crear las denominadas Casas de la Provincia – edificios que concentrarán a todas las dependencias bonaerenses en los municipios- y que fueron abiertamente cuestionadas por la oposición al calificarlas como lugares de “burocratización” destinados a los militantes del Frente de Todos.
En su exposición, el mandatario bonaerense dijo que permitirán “ahorrar el despilfarro en materia de alquileres del estado provincial en muchísimas localidades”.
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Axel Kicillof además ponderó el valor simbólico de los edificios para los ciudadanos del interior provincial: “No solo se va a ahorrar sino que muchas de las oficinas van a ser la cara visible del estado provincial en el interior. Hasta ahora era algo vetusto, decrépito y abandonado y no puede ser lo que muestre el gobierno provincial” sostuvo.
“El estado provincial tiene que dejar de verse como algo lejano y abstracto para ser considerado como un aliado” concluyó.
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