Con una férrea defensa de las conquistas universitarias consagradas por la Reforma de 1918, la Facultad de Salud de la Unicen respondió a las denuncias por “adoctrinamiento” lanzadas el último fin de semana por el intendente de Olavarría, Ezequiel Galli, a raíz de un parcial que ponía a discusión la atención sanitaria brindada por la comuna en las localidades serranas del Partido.
Luego de entregarle una carta al Jefe Comunal, el decano de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UNICEN, Héctor Trebucq, habló con INFOCIELO y se refirió al polémico episodio protagonizado por el alcalde del PRO.
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En primer lugar, reconoció que pudo “resultar inapropiado no haber quitado o borrado los nombres que aparecen en el examen y que obviamente ha molestado” pero seguidamente esgrimió una serie de argumentos para contrarrestar las acusaciones vertidas por Ezequiel Galli.
“No somos islas; no estamos fuera de una realidad social”
Para la máxima autoridad de la Facultad de Ciencias de la Salud de la UNICEN es necesario “poner en relieve qué es la autarquía, la autonomía y la libertad de cátedra. Por qué no se puede hablar de adoctrinamiento a los estudiantes cuando se trata de personas adultas, críticas y reflexivas. O cuál es el tipo de formación actual en la que se consideran las problemáticas sociales y de salud y cómo se abordan desde la metodología de la problematización a partir de trabajar con ejemplos” resumió.
Trebucq confió que el intendente Ezequiel Galli lo llamó antes de que saliera el tweet que desató la polémica: “Habló conmigo y el rector pero ya había tomado la decisión de salir a publicar en las redes. Ante eso teníamos que responder. Él pedía una respuesta también y el claustro estudiantil se sintió tocado- salió el Centro de Estudiantes a responder y también los gremios docentes salieron a responder-. Es necesario aclarar cuál es el rol de la universidad y cuál es el de la municipalidad” advirtió.
En esa dirección, subrayó: “No somos islas; no estamos fuera de una realidad social. Los estudiantes se forman en esos contextos y con esas problemáticas. Son insumos muy valiosos” dijo.
Sobre sus sentimientos en torno a la acusación, expresó: “Me molestó en lo institucional por el rol social que tenemos. En lo personal, sentí que tenía que aclararlo y creo que las aclaraciones entre personas adultas nos fortalecen. Adoctrinar son palabritas que no nos gustan para nada” expresó.
“La intromisión nos lleva a tiempos no democráticos”
El decano de la Facultad de Salud remarcó que el adoctrinamiento “no tiene nada que ver con la formación en problemáticas sociales”.
“No es pertinente que una autoridad conozca las metodologías docentes actuales o cómo funciona la educación universitaria. Veníamos acostumbrados a una formación tradicional en medicina. Y eso ha cambiado en los últimos 25 años y por ahí no se conoce. Las problemáticas son insumos esenciales en la formación. Criticarlo desde ese desconocimiento me parece inoportuno y desacertado” continuó.
En ese sentido, ejemplificó: “Yo no me pongo a criticar las obras sanitarias porque no entiendo, no estoy actualizado. Tengo que tener alguna incumbencia para poder discutir. No digo que no la tenga el Intendente pero con sus palabras representó un desconocimiento de lo que es la autonomía y la autarquía universitaria pero creo que hablando tenemos que entendernos” dijo.
Consultado sobre si el episodio resiente la relación con el Municipio de Olavarría aclaró: “La relación con el municipio es ultra necesaria y el Municipio también lo entiende así. Con este gobierno y el anterior siempre hemos trabajado de manera conjunta. El Intendente ha formado parte de la firma de escritura del edificio de nuestra Facultad. Hemos firmado convenios donde nos ceden espacios áulicos y esto tiene que seguir porque institucionalmente esto no se puede resentir. Es un problema que yo lo doy por superado” afirmó.
El debate sobre la educación pública, sujeta a los tironeos políticos
Cómo advirtió INFOCIELO el último domingo, la polémica con la Facultad de Salud se inscribe en un complejo debate político entre el oficialismo y el Frente de Todos. Asediado por las críticas opositores respecto a un plan de viviendas, la comuna trajo el debate de la paralización de una obra de ampliación de la unidad académica que es financiada por el gobierno nacional.
“Previo a esta situación hubo un documento público de los jóvenes Pro que fue incluso presentado por la bancada de Juntos PRO el cambio donde se hablaba del abandono de la obra. Por eso fui a exponer y a aclarar que en todo momento tuvimos el acompañamiento del ministerio de Obras de la Nación” expresó Héctor Trebucq.
Finalmente y a modo de reflexión, buscó problematizar los discursos públicos que hablan de adoctrinamiento en la educación: “A nosotros ya nos habían hecho unas pintadas que adoctrinábamos. Adoctrinar es creer que nuestros estudiantes son sujetos pasivos, acríticos. Cuando nuestra intención es que sean futuros profesionales críticos, analizadores, reflexivos” diferenció.
Para la autoridad universitaria, “reflexionar y analizar un artículo que salió desde la prensa nos resulta un insumo formativo imprescindible y eso no se puede negar. Adoctrinar es un término feo. Y lo otro es que la intromisión en los contenidos y la metodología nos llevan a tiempos no democráticos. La autonomía y la autarquía es fortalecer la democracia. La democracia nos trajo la autonomía y la libertad de cátedra” concluyó.
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