¿Mito?: Las parejas que van a Colonia en Uruguay se están por separar

Colonia del Sacramento es una ciudad de Uruguay que en algunas calles parece sacada de un cuento de hadas. Con sus calzadas empedradas, sus edificios coloniales, su faro histórico y sus atardeceres sobre el Río de la Plata, es el destino ideal para una escapada romántica de fin de semana. O al menos eso es lo que piensan muchas parejas argentinas que cruzan ‘el charco’ en busca de un momento de relax y amor.

Sin embargo, lo que debería ser una experiencia inolvidable se convierte en muchos casos en el principio del fin.

¿Se convierte en muchos casos en el principio del fin?

Según una extraña teoría que circula en las redes sociales, las parejas que viajan a Colonia se están por separar. ¿Por qué? Hay varias hipótesis al respecto.

Algunos dicen que Colonia es una ciudad tan bonita y tranquila que hace resaltar, por contraste, los defectos y problemas de la pareja.

Otros sostienen que es una especie de última oportunidad para salvar la relación, pero que al no gastar mucho dinero ni tiempo, demuestran que no tienen muchas esperanzas.

Y hasta hay quienes creen que simplemente es una maldición…o una coincidencia.

¿CASUALIDAD O CAUSALIDAD?

Lo cierto es que hay varios testimonios de personas que aseguran haber terminado con sus parejas después de visitar Colonia.

Incluso hay famosos que se suman a la lista, como Pampita y Benjamín Vicuña, o Jimena Barón y Daniel Osvaldo.

Lo más curioso es que este mito no tiene ningún fundamento científico ni estadístico.

Según el último censo nacional, el porcentaje de divorcios en Argentina es del 2,4%, y no hay datos que indiquen que haya una relación con el destino turístico elegido.

Además, Colonia es una ciudad muy visitada por los argentinos, por lo que es lógico que haya más casos de separaciones entre quienes la conocen.

Entonces, ¿hay que tener miedo de viajar a Colonia en pareja? La respuesta debería ser que no.

Colonia es una ciudad hermosa y llena de encanto, que ofrece muchas actividades y lugares para disfrutar en compañía. Lo importante es ir con una actitud positiva y abierta, y no dejarse influir por los rumores o las supersticiones. Después de todo, el amor no depende del lugar, sino de las personas.