El gobierno provincial analiza por estas horas dar un paso muy esperado por quienes piden que se flexibilice la cuarentena. En Gobernación ya admiten que es inminente la habilitación para realizar deportes, salidas recreativas y paseos con menores de edad, como se permite en las zonas donde la circulación del coronavirus no es importante. Así lo confirmaron a INFOCIELO fuentes del Gobierno provincial, aunque sin dar demasiadas precisiones.
Se sabe que el gobernador Axel Kicillof es más partidario de endurecer la cuarentena que de flexibilizarla. En las últimas horas se reunió con Alberto Fernández y con Horacio Rodríguez Larreta, el jefe de Gobierno porteño, que está en las antípodas de sus ideas. También se asesoró con especialistas que lo alertaron sobre la situación del Conurbano, donde la tasa de duplicación de casos llega a 7 días.
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En el interior la situación es distinta y los intendentes son cada vez más presionados para permitir la apertura de actividades económicas y recreativas.
En las últimas horas hubo una fuerte protesta en las calles de Mar del Plata y el intendente de esa ciudad, Guillermo Montenegro, tuvo que elevar un pedido al Jefe de Gabinete, Carlos Bianco, para que las permita. En La Feliz hay 36 casos confirmados desde el 10 de marzo. 29 están recuperadas de la infección, 3 han fallecido y 4 están en tratamiento.
No obstante, desde la segunda semana de mayo, los intendentes de distritos más pequeños del interior vienen dando autorización para la práctica de deporte y las salidas recreativas. Uno de los primeros fue Monte Hermoso, que se declaró libre de circulación comunitaria y permitió caminatas, running y otras actividades desde el 11 de mayo.
A Monte Hermoso le siguió una gran cantidad de municipios que cumple ciertas condiciones: escasa o nula cantidad de casos, distancia geográfica de los núcleos de contagio y posibilidad de generar barreras sanitarias.
A más de uno se le “escapó la tortuga”: habilitaron permisos y tuvieron que dar marcha atrás. Son los casos de San Pedro, Chascomús y de Castelli, que habilitaron actividades y luego las restringieron ante brotes o inconductas de parte de sus vecinos.
Todos ellos actuaron sin el aval de la provincia, aunque amparados por los decretos nacionales. Se trata de aprovechar las “zonas grises” de los decretos reglamentarios. En la Provincia buscan llenar ese vacío legal y se preparan para admitir “a demanda de los intendentes” y bajo su responsabilidad la práctica de esas actividades.
Desde ya que la zona metropolitana -distritos del Conurbano y el gran La Plata- quedará fuera de la cuestión.
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