El tema en Estudiantes es la continuidad de Domínguez. También, claro, el posible regreso de Marcos Rojo. Pero nada es más trascendente para el equipo que la situación de su conductor, el segundo DT que más títulos ganó en el club, y a tan poco del cruce de la copa Libertadores. Y es tan tema, claro, que hasta el propio Juan Sebastián Verón se refirió públicamente. Incluso, con un mensaje de puertas abiertas, que en realidad es la sensación que hoy se vive en el club con respecto al futuro del DT.
Verón declaró con muñeca política pero también con un MD directo al Barba. Dejó en claro que hoy el club no lo va echar, pero que tampoco esta situación se puede extender mucho tiempo más. Y remarcó, varias veces, que el momento del equipo es malo.
“Esto es fútbol, y el que está en fútbol, sabe… Va en los momentos, este un momento que se viene extendiendo, que no encuentra continuidad y eso en el fútbol es difícil de sostener. Es normal que se cuestione al jugador, al técnico y a la dirigencia… No hay que asustarse de eso”, dejó en claro la Bruja, sin atacar los cuestionamientos al DT. Incluso, poniéndolo en el terreno de la lógica.
Es, a todas luces, una frase que muestra que Estudiantes no actuará en lo inmediato, pero sí puede hacerlo por el bien del equipo si esto se extiende, sobre todo, con la Libertadores a la vuelta de la esquina. Sin embargo, lo más contundente de la declaración de Verón fue la invitación que le hizo a todas las partes a reflexionar sobre la situación que vive el equipo. Ahí incluyó a los jugadores, incluso a la dirigencia misma, pero fundamentalmente, fue un mensaje para lo que Domínguez sigue sin ver: la falta de respuesta del equipo, que se repite y se profundiza.
“Hay que saber hasta dónde, hay que entender. Puedo, no puedo, llego, tengo recepción del otro lado, puedo aferrarme de algo. La decisión pasa por ahí más que por decir andate. Si esto sigue así, se va a tener que dar la salida”, sostuvo.
Si Domínguez está analizando la posibilidad de irse aun ganándole a Huracán, como publicó Cielosports, tiene que ver con esta cuestión. Más allá de decir que tiene fuerzas y que confía en revertir la situación, también internamente en estas horas se dio cuenta que el poder o no poder no depende solo de él y que el desgaste de un ciclo de más de dos años a veces es irreversible.
Por lo pronto, es un mensaje (el del equipo y el de Verón) que el DT tiene que saber leer y actuar en consecuencia. Ahora resta saber cuál será su decisión…