Gimnasia dejó atrás tres semanas de trabajo en el predio de Abasto y ayer disputó su primer partido amistoso oficial ante Temperley, donde el cuerpo técnico dispuso dos equipos para evaluar a los futbolistas con los que ya cuentan.
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El plantel tripero se reencontró en Estancia Chica y, de los dos jugadores que se recuperaban de diferentes lesiones, uno volvió a la par y el otro todavía sigue aparte.
Si bien el Indio Ortiz ya cuenta con tres caras nuevas, Matías García, Leonardo Morales y Maximiliano Caire, la dirigencia trabaja sobre varios nombres ya que el técnico pidió sumar entre cinco y seis jugadores titulares al plantel que comenzó la pretemporada a principio de mes.
La dirigencia encaró varias negociaciones en este tiempo y una de ellas sigue vigente y desde el club esperan que tenga un final feliz. Brahian Aleman volvió a Arabia Saudita para incorporarse Al-Ettifaq. En La Plata apelan al trabajo del jugador para encontrar una salida, ya que no quieren resignar la plata que le deben los árabes.
Pero para el técnico Tripero aún es más importante reforzar la defensa y el ataque. En la última línea los dirigentes trabajan sobre un jugador paraguayo, del cual aún no trascendió el nombre. Además aún siguen negociando con Lanús por Rolando García Guerreño.
El ataque aparece como la zona más difícil ya que requiere de un dinero que el club no cuenta y porque se quedó sin Santiago Silva y se quedará sin Jan Hurtado. Las opciones que aparecen son las de Claudio Spinelli (Génoa) y Rodrigo Salinas (Vélez) pero ambos cobran un sueldo muy alto para lo que pueden pagar en la sede de calle 4.
