Un acalorado debate explotó en redes sociales cuando la cuenta “Miss Ofertas By Vero“, conocida por compartir ofertas de tiempo limitado o stock reducido, se encontró en el centro de una polémica. “Vero”, quien administra esta cuenta sin fines de lucro y alerta a sus seguidores sobre descuentos, publicó ofertas inusuales de productos como piletas y celulares a precios irrisorios, generando críticas cruzadas entre quienes la defienden y quienes la culpan de fomentar y viralizar (con malicia y a sabiendas) evidentes errores comerciales.
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El desencadenante fue un mensaje privado que Vero compartió públicamente, donde un usuario le recriminaba por divulgar lo que consideró un indudable error de precio por parte del vendedor. El mensaje decía:
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“No podés ser tan rata y conchud*. Son cosas que pasan con Meli (así le llaman a Mercado Libre), o error humano o mismo de la app. Encima tirás que lo hacen para ser mercadolíder. Ni dos ventas cada dos meses podés cancelar para ser mercadolíder. Claramente se equivocaron, roñosa.”
La responsabilidad del error: ¿comerciante o influencer?
El trasfondo del debate gira en torno al ecosistema de comercio electrónico, particularmente en plataformas como MercadoLibre, donde errores en la carga de precios suelen suceder.
En muchos casos, los vendedores optan por asumir las pérdidas, ya que cancelar las compras puede resultar en sanciones graves, como perder el estatus de vendedor confiable. Para algunos, la publicación de Vero amplificó el alcance del error, causando un daño mayor al comerciante.
Otro mensaje recibido por la influencer reflejaba esta acusación:
“Además de que lo fomentaste publicándolo acá cuando de prepo sabías o que era un error o que no van a dar las piletas. Solo ganas de joder.”
Sin embargo, los defensores de “Vero” argumentan que ella simplemente comparte ofertas disponibles, dejando a criterio del consumidor decidir si avanzar con la compra. Alegan que culparla es desviar la responsabilidad del comerciante que cometió el error inicial.
La respuesta de “Miss Ofertas By Vero”
Ante las críticas, Vero utilizó su cuenta para defenderse, publicando un mensaje que resumía su postura:
*”Gente:
Yo no fomento nada, yo simplemente publico cosas que encuentro o me pasan. Usen su capacidad para discernir lo que les sirve y lo que no.
Cuando Disco, Vea y Jumbo pusieron el Cremón a $1500, compraron. Sean coherentes y si sienten que algo es un error y su moral no los deja avanzar, no avancen.
Cuando compraron el mueble de Sodimac o Frávega nadie se quejó. Los vinos de Día bien que se los chuparon calladitos.”*
El mensaje buscó poner en evidencia cierta hipocresía de algunos usuarios que, en otras circunstancias, no dudaron en aprovechar ofertas similares.
La eterna pregunta: ¿quién tiene la culpa?
La polémica planteó una pregunta central: ¿de quién es la responsabilidad? Para algunos, el comerciante debería asumir las consecuencias de sus errores, mientras que otros consideran que los influencers deben ser más conscientes del impacto de sus publicaciones.
Lo que queda claro es que, en el mundo de las redes, cualquier acción puede convertirse en tema de debate, especialmente cuando hay intereses comerciales y éticos en juego.
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