Un inesperado cruce, a los discursos incendiarios del presidente Javier Milei del ex Gran Hermano, mostró a Trezeguet dispuesto a plantarse con más audacia que cualquier legislador de la oposición.
Gastón Trezeguet, productor televisivo y figura mediática, sorprendió a todos con un tuit demoledor que dejó a Javier Milei tambaleando en el ring de las redes sociales.
Todo comenzó con esa arenga de pretendida épica del mandatario en el Foro de Davos, donde Milei aseguró haberles cantado las cuarenta a las “élites globales” por querer imponer “agendas bien pensantes” que solo buscan, según él, esclavizar a las masas y expandir el Estado.
En un extenso posteo titulado “De falacias y algo más”, Milei luego desplegó una serie de acusaciones, mezclando conceptos de libertad, ataques a los medios, y una afirmación que encendió la mecha: continuó vinculando la agenda de diversidad sexual con pedofilia, en un gesto que muchos consideraron no solo polémico, sino abiertamente homofóbico.
Ahí entró Trezeguet, y lo hizo como si estuviera en la gala de eliminación de Gran Hermano, pero esta vez en lugar de micrófono utilizó su teclado cargado de ironía y sin filtro.
El tuit que publicó fue tan directo como lapidario: “Decir que todos los que promueven la agenda de la diversidad son pedófilos está mal, Javier. Es como si yo dijera que todos los que se llevan bien con la hermana se la quieren coger.” … Boom. Twitter explotó.
Decir Que todos los Que promueven la agenda de la Diversidad son Pedofilos está mal Javier , es como si yo dijera que todos los Que se llevan bien con la hermana se la quieren coger. https://t.co/kKJmNzcCRT
— Gaston Trezeguet (@GastonTrezeguet) January 26, 2025
El tuit no solo resumió la indignación de un sector amplio de la sociedad, sino que también puso en evidencia una contradicción monumental: ¿cómo puede un presidente que se llena la boca hablando de libertad atacar derechos conquistados por las minorías?
Lo interesante de esta historia es que Trezeguet no siempre fue crítico de Milei. En los albores del ascenso libertario, llegó a expresar simpatía hacia sus ideas.
No era el único; muchos dentro de la comunidad LGBTQ+ confiaron en la retórica del “respeto irrestricto al proyecto de vida del prójimo” que Milei prometía.
Pero las luces de alarma se encendieron rápido. El discurso de Davos, sumado a sus ataques constantes hacia quienes defienden la diversidad, fueron demasiado incluso para quienes antes lo apoyaban.
El polémico tweet de Milei:
DE FALACIAS Y ALGO MÁS
— Javier Milei (@JMilei) January 26, 2025
Hace unos días nos paramos en el estrado del Foro de Davos y le dijimos en la cara a las élites globales que la ideología que hace décadas pretenden imponerle al mundo nos está condenando al fracaso.
Planteamos que escudados en buenas intenciones y…
La chispa que encendió Trezeguet también tiene un trasfondo político más amplio. No se trata solo de un intercambio de tweets, sino de una batalla ideológica que pretenden que se instale en el mundo entero, especialmente de occidente.
Desde Trump en EE. UU. hasta Viktor Orbán en Hungría o Meloni en Italia, los gobiernos de derecha radical han alimentado un clima de hostilidad hacia las minorías. Milei, en este sentido, no está inventando nada nuevo; simplemente está siguiendo un manual previsible, aunque ahora tiene que enfrentar a figuras que no se quedan calladas, como Trezeguet.
La respuesta del público no tardó en llegar. Mientras algunos aplaudían la valentía del ex Gran Hermano, otros se sumaron a la defensa del presidente con argumentos igual de polémicos. En cualquier caso, lo que queda claro es que la supuesta “libertad” de Milei empieza a mostrar límites bastante selectivos.
Quizás la política necesita más figuras como Trezeguet: dispuestas a decir lo que muchos piensan, pero con el suficiente ingenio como para que hasta el más indignado suelte una carcajada incómoda. Porque si algo quedó claro con este episodio es que, en la Argentina de hoy, el reality no termina nunca.