Una polémica creció al interior de la Sociedad Rural (SRA) y los socios comenzaron a cuestionarse los motivos y el trasfondo de la convocatoria a una asamblea extraordinaria para la semana que viene de la entidad que comanda Nicolás Pino.
La convocatoria fue extendida a los socios para el día 1 de febrero, donde se informó que es “para tratar temas de extrema trascendencia desde lo económico y desde lo patrimonial” para la entidad.
Uno de los socios, que planteó quejas fue Santos Zuberbuhler, quien marcó que en esta asamblea se tratará la venta de 9 departamentos en la calle Florida, del edificio de la calle Olleros donde funcionaba el Instituto Superior de Enseñanza, Estudios y Extensión Agropecuaria (ISEA) y tambien la suscripción del acuerdo de explotación del predio de Palermo por 10 años.
“Se trata de puntos de enorme impacto para la economía de la entidad en los próximos años y sobre el patrimonio de la SRA y por ende, de todos los socios”, planteó el ruralista.
Los cuestionamientos a la Sociedad Rural
En ese plano, cuestionó en primer lugar la fecha de la convocatoria, dado que es pleno periodo de vacaciones para buena parte de la masa societaria, por lo que entiende que no es “óptima” para tratar temas de semejante importancia.
En otro plano, lanzó varios interrogantes sobre las ofertas para la venta de los inmuebles, como así también el “apuro” en vender los inmuebles que es patrimonio de los socios, en especial en un contexto donde el mercado inmobiliario está deprimido. “¿Qué destino tendrian los importes que recibirá la entidad por esas ventas?”, añadió Zuberbuhler.
“Respecto de la explotacion del predio, los socios sabemos (por una carta que se hizo pública) que hubo un principio de acuerdo con una empresa que estaba interesada en la explotación, que sin embargo fue dada de baja esgrimiendo explicaciones dudosas”, lanzó.
Por eso, pidió saber “por qué cayó esa oferta y por qué se decidió acordar nuevamente con los actuales socios en la explotación del mencionado predio”.
“¿Cuáles son las condiciones de ambas ofertas? ¿Por qué se adelanta la firma del nuevo acuerdo cuando todavía restan 2 años para que finalice el actual acuerdo de explotación?”, agregó.
En ese plano, sostuvo que “estas son algunas de las preguntas que, como socios, tenemos el derecho y el deber a realizar. Dada la relevancia de todos estas temas, no deberian las actuales autoridades de la entidad suspender la asamblea e informar previamente a los socios para que los actos de esta naturaleza se desarrollen con la mayor transparencia y posibilitándo la participacion de la mayor cantidad de socios posibles contando con toda la informacion necesaria”.