Finalmente, la segunda sesión ordinaria del Senado no pudo realizarse por falta de quórum. En la orden del día estaba ingresado el proyecto que determinaba que legisladores, concejales y consejeros escolares puedan ser reelectos indefinidamente. Unión por la Patria cuanta con 24 senadores, pero Sofía Vanelli (massista) avisó por redes sociales que no concurriría a la sesión en desacuerdo por el proyecto de su compañero de bancada Luis Vivona que busca instaurar las reelecciones eternas para todos, menos los intendentes.
Verónica Magario, vicegobernadora y presidenta del Senado, no estuvo nunca al frente de la conducción de la sesión y el sillón de la presidencia fue ocupado por el vicepresidente primero Luis Vivona. “Quiso esquivar el fracaso de esta sesión, pero esto salpica a todo el peronismo”, sostuvo un senador de varios años a la pasada en los pasillos de la Legislatura.
Sergio Massa hizo prevalecer su palabra de o borrar con el codo lo escrito por la mano en 2016 cuando fue impulsor de limitar los mandatos a través de un proyecto del diputado Rubén Eslaiman. Muchos leyeron un golpe en la mesa en la dificultosa interna del peronismo, que si bien está centrada entre kicillofistas y cristinistas, el massismo tiene un papel fundamental, y hoy en el senado se hizo notar.
Desde Unión, Renovación y Fe avisaron que los tres senadores (Kikuchi, Vargas y Ventura) daría quórum sí y solo sí el peronismo entero bajaba al recinto, cosa que no ocurrió. Marcelo Daletto, referenciado con el monzoismo, era el otro senador que bajaba para habilitar la sesión.
Los senadores kirchneristas de Unión por la Patria se preparaban para aprobar las reelecciones eternas, menos para intendentes, pero a último momento se le complicó juntar voluntades para dar inicio a la sesión.
Lo cierto es que la baja de Vanelli complicó todo y la sesión se cayó. El kirchnerismo tuvo una derrota legislativa que se lee puertas adentro de la interna.
Sería Marcelo Daletto, referenciado con el Emilio Monzó, quien daría el voto que falta para habilitar el debate. Con mayoría simple, es decir con la mitad más uno de los senadores presentes, el kirchnerismo se anotará una victoria legislativa.
Los bloques opositores hicieron su trabajo y tanto UCR-Cambio Federal, como el PRO, Derecha Popular y La Libertad Avanza, no dieron quórum para que se trate el proyecto.
LA SESIÓN QUE NO FUE
A las 18:21 el senador Luis Vivona, vicepresidente primero de la Cámara de Senadores se sentó en el sillón de la presidencia, pero no contaban con el número necesario para comenzar la sesión.
Tomó la palabra el senador de Unión, Renovación y Fe, Carlos Kikuchi, quién lamentó que los bloques opositores no dieran quórum y no puedan tratarse no solo las reelecciones eternas, sino muchos proyectos más. Kikuchi sostuvo que “ganemos o perdamos las discusiones hay que darlas y acá estamos para eso”.
Acto seguido habló la presidenta del bloque Unión por la Patria María Teresa García quién tuvo un discurso muy duro para con la oposición al advertir que están más preocupados por el armado electoral que al trabajo legislativo.
García sostuvo que “la oposición tuvo una actitud maniquea y extorsiva al no dar quórum, deben tener responsabilidad legislativa para dar las discusiones ganen o pierdan las votaciones. Hay proyectos esperados por muchas personas, como la protesta de trabajadores de Madygraf que están en la puerta esperando por la expropiación y recuperar sus fuentes de trabajo. La historia los juzgará”, finalizó la senador peronista.
Magario, además de cerrar el palco de prensa, ahora decidió que los periodistas tampoco estén en el salón Antonio Cafiero como la sesión pasada. El lugar asignado es el hall de entrada para la prensa acreditada, sitio que carece de conectividad para ejercer la tarea periodística. La transmisión que proporcionaron durante el comienzo y pedido de cuarto intermedio careció de audio y desde la dirección de Prensa se informó que el receso era sin tiempo fijado.
EL PROYECTO
Luis Vivona, senador kirchnerista dentro del oficialismo, presentó un proyecto de Ley para que se habiliten nuevamente (en 2016 se había legislado para limitar a dos los mandatos) las reelecciones indefinidas de legisladores, concejales y consejeros escolares, no así intendentes.
El proyecto tuvo el visto bueno de la comisión de Legislación General y estaba listo para ser tratado en el recinto. Se convocó a una sesión especial, pero horas antes la senadora de Unión por la Patria, pero que responde al ministro Andrés Larroque, Aylén Durán presentó un proyecto similar, pero que incluía a los jefes comunal. La sesión se cayó.
EL MASSISMO AVISÓ QUE NO CUENTEN CON ELLOS
La senadora massita Sofía Vanelli ya levantó la primera polvareda de la tarde a minutos de la sesión en el Senado. La Cámara Alta se presta a tratar, a escondidas y sin prensa, las reelecciones eternas y Vanelli ya avisó su descontento por el tratamiento y avisó que no va a asistir.
En su cuenta de X, Vanelli expresó que “La sesión de hoy… ¡atrasa! Tomé la decisión de NO asistir (a la sesión). En lugar de discutir los problemas reales de las y los bonaerenses, estamos debatiendo las RERERE… de legisladores????”, comenzó su posteo la referente de Sergio Massa en el Senado.
Más adelante Vanelli agregó: “No entendieron nada. Votar a favor solo nos pone más lejos de la gente. Quienes votan a favor -o dan quorum para- de eliminar los límites a las reelecciones no representan a la gente, se representan a sí mismos. Ser parte de esta maniobra es ser cómplice de la decadencia política en la que estamos. La política necesita más renovación, no menos”, finalizó.
Vale recordar que el massismo fue quien presentó el proyecto con la autoría de Rubén Eslaiman y aprobado bajo la presidencia de Diputados de otro massista como Jorge Sarghini.
MAGARIO ORDENÓ SESIONAR DE ESPALDAS A LA GENTE
La semana pasada se realizó la primera sesión ordinaria. En el temario solo se consignaba la aprobación de 131 pliegos judiciales. La presidenta del cuerpo y vicegobernadora Verónica Magario, a través de la dirección de Prensa, decidió que los periodistas acreditados no puedan ingresar al recinto para cubrir la sesión y debían seguir la transmisión oficial en un televisor.
Sin explicaciones oficiales, la prensa acreditada que cubre el día a día de la Legislatura encontraba cercenada su libertad para ver y contar lo que sucedía dentro del recinto.
La información con la que se contó fue la que quiso transmitir Magario a través del canal oficial, a tal punto de que todavía, a una semana de la sesión, no se informó como votaron los legisladores un tema tan delicado como es la designación de jueces y funcionarios judiciales para los 20 departamentos que tiene la Justicia bonaerense.
Hoy, cuando se trate si los legisladores, concejales, consejeros escolares y, tal vez, intendentes, puedan ser reelectos cuantas veces se les plazca las ganas, tampoco habrá periodistas con la posibilidad de informar.
MAGARIO A LO MILEI
El Gobierno de Javier Milei firmó, días atrás, la resolución 1319/2025 en dónde la secretaría de Medios dispuso un sistema altamente restrictivo para los periodistas que cubren los actos de Gobierno. Se limitó el acceso, se dispusieron cupos máximos, una matriz de evaluación con puntajes mínimos, exigencia de documentación sobre audiencia y trayectoria, y hasta un código de vestimenta formal.
El Poder Ejecutivo nacional fijó tres lineamientos en esa resolución: los “Lineamientos generales y específicos para la acreditación”, el “Procedimiento para la solicitud de accesos y acreditación” y un “Modelo de declaración jurada y matriz de evaluación objetiva”.
En el Senado provincial el año había comenzado con movimientos extraños. Al comienzo de las sesiones se limitó el número de periodistas acreditados. Desde la presidencia alegaron que era por un tema de infraestructura en el recinto. Luego, en la siguiente sesión especial, en la cual de trató la eliminación de las elecciones primarias, no se permitió grabar videos. Hubo otra sesión especial semanas después en la cual ya no se pudo transmitir en vivo por las redes sociales de ningún medio de comunicación.