“La ley fue escrita por quienes buscaban beneficiarse de sus vacíos legales”, asegura el abogado Daniel Montes en entrevista con Infocielo. Especialista en derecho electoral, Montes se refiere a la ley que pone límite a las reelecciones en la Legislatura y que, según su mirada, “tiene una redacción técnicamente defectuosa”.
Según explica, “la ley fue escrita por gente que la pensó con trampas, con vicios. Esto no es ingenuidad: sabían que se venía un escenario donde muchos querían quedarse más tiempo, y dejaron zonas grises para poder discutirlo más adelante”. Desde su lectura, esa falta de claridad solo favorece a quienes tienen recursos para judicializar o condicionar la interpretación normativa.
“FACUNDO TIGNANELLI NO PODRÍA SER CANDIDATO“
Montes pone el foco en varios casos específicos, pero especialmente en el del jefe del bloque de Diputados de Unión por la Patria, Facundo Tignanelli, quien se presenta como candidato a renovar su banca. “El diputado Tignanelli no está habilitado para ser reelecto. Cumplió dos períodos: uno como titular entre 2017 y 2021, y otro como suplente hasta 2023, cuando reemplazó a Federico Otermín tras su elección como intendente de Lomas de Zamora. Eso es reelección”, afirma.
“No importa si estuvo 730 o 721 días. La ley habla de períodos, no de días. No hay un gris, hay una trampa interpretativa”, insistió Montes en diálogo con Infocielo. A su entender, el dictamen del constitucionalista Andrés Gil Domínguez que habilita la candidatura “es parte de una operación para vestir de legalidad lo que no lo es”.
RANZINI, VIVONA Y LOS CAMBIOS DE CÁMARA Y SECCIÓN
Otros casos que cuestiona el abogado tienen que ver con Matías Ranzini, jefe de bloque del PRO, y Luis Vivona, actual senador. “Ranzini cambió de sección electoral pero ya fue legislador dos períodos, y Buenos Aires es un distrito único. Cambiar de región no lo habilita. Vivona, por su parte, intenta cambiar de Cámara, de Senador a Diputado, como si eso no contara. Pero la ley dice claramente: dos mandatos, sin distinción de Cámara“.
Montes resalta que “la ley se refiere a legisladores en general, no importa si son senadores o diputados. El truco de cambiar de Cámara no es más que un atajo para perpetuarse”. En ese sentido, recordó que Luis Vivona presentó un proyecto para habilitar las reelecciones indefinidas y, al no conseguir los votos, optó por cambiar de Cámara. “Es un atajo que no resiste el menor análisis moral ni legal”.
FALTA DE ACCIÓN JUDICIAL Y RESPONSABILIDADES COMPARTIDAS
Pese a que estos casos son conocidos, ningún partido judicializó las candidaturas. “Ni desde el PRO, ni desde los bloques libertarios, nadie fue a la Justicia. Nadie llevó el tema a la Suprema Corte, ni siquiera a la Junta Electoral para que se aclare el concepto de período legislativo”, señaló con tono crítico.
“Cuando un legislador corre a buscar un dictamen de un abogado es porque sabe que está pisando fuera de la ley“, disparó Montes, al cuestionar el rol de los asesores jurídicos utilizados como escudo para avalar interpretaciones a medida. Y remató: “El problema no es solo la ley, sino cómo la usan. No hay voluntad de respetar la norma, hay voluntad de forzarla“.
UNA LECTURA SOBRE LA DEMOCRACIA Y EL SISTEMA POLÍTICO
Para el abogado, estas irregularidades terminan dañando al sistema político en su conjunto. “La ciudadanía puede no entender si Tignanelli estuvo 721 o 730 días, pero sí entiende que la política no puede estar por encima de la ley. Hay un límite moral que se cruzó hace rato”.
“La democracia necesita transparencia, no trampas. Y cuando las leyes se redactan para que beneficien a quienes las escriben, perdemos todos”, reflexionó Montes. Para cerrar, insistió en que estas conductas solo generan desconfianza: “Si se quiere volver a enamorar a la gente con la política, este no es el camino”.