La disputa entre el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, y su par nacional, Patricia Bullrich, sumó un nuevo capítulo en las redes sociales. El funcionario provincial salió a responderle directamente luego de que la titular de la cartera de Seguridad de Javier Milei compartiera un artículo de Clarín que habla de un “giro” en la causa de los policías cesanteados por su presunto vínculo con La Libertad Avanza.
Bullrich publicó en su cuenta de X el título y la bajada de la nota que señala que ahora la Justicia investiga si hubo espionaje contra los agentes desplazados por el gobierno de Axel Kicillof. El artículo describe que la fiscalía de Álvaro Garganta busca establecer cómo se obtuvieron datos de la “denuncia anónima” que dio origen al sumario, incluso de un oficial apartado hace una década, así como accesos a bases de datos oficiales.
La respuesta de Alonso fue un posteo directo titulado en mayúsculas: “BULLRICH MIENTE”. “¿De dónde surge tanta preocupación por esta causa, ministra? No interfiera con la investigación judicial”, comenzó el ministro bonaerense. “No hay nada de lo que dice que sea cierto: la causa por conspiración sigue en marcha, con más pruebas cada día. Ya se lo informé”, agregó, en alusión a las comunicaciones previas entre ambos sobre el caso.
El funcionario provincial también le reprochó a Bullrich “sentirse perseguida por la historia en la que usted fue acusada por el actual Presidente y que nunca se aclaró” e instó a que “no repita los mismos hábitos: la mentira no conduce a nada”. En otro tramo, sugirió que la preocupación de la ministra podría estar vinculada con “alguna medición electoral” y le pidió que no intente “intervenir en la Justicia mintiendo”.
Este nuevo cruce se suma a una saga de enfrentamientos públicos entre Nación y Provincia a raíz de la separación preventiva de 24 oficiales superiores de la Policía Bonaerense, en su mayoría pertenecientes a la Dirección de Prevención de Riesgos Ecológicos y Sustancias Peligrosas. Según la Auditoría General de Asuntos Internos, los uniformados habrían realizado tareas proselitistas en favor del ex comisario y candidato libertario Maximiliano Bondarenko desde oficinas oficiales, además de elaborar un plan de reforma policial y borradores legislativos para el espacio.
Mientras Alonso insiste en que la causa penal y las actuaciones administrativas continúan “con más pruebas cada día”, Bullrich redobla las acusaciones contra Kicillof por lo que califica como una persecución política. El conflicto por los “polipunteros” libertarios, lejos de enfriarse, se volvió un capítulo central de la campaña bonaerense.