Franco Flexas, es intendente de General Viamonte desde 2015. Enrolado en la UCR, ve con buenos ojos la posibilidad de construir desde su partido un espacio de centro y con agenda bonaerense para las elecciones de este año. Incluso participó del lanzamiento de “Ahora” en La Plata, esta misma semana.
Mano a mano con INFOCIELO, Flexas analiza además el impacto de una eventual candidatura de Cristina Kirchner y le advierte al peronismo que está entrando en un período crítico, en “modo UCR 2001”.
— ¿Conviene apostar por el centro en estas elecciones?
— De conveniencia, nada. Porque es un salto al vacío. Se van a dar escenarios donde, en algunas secciones, no se meta ningún candidato. Tiene que ver con reforzar la identidad propia bonaerense. ¿Para qué hacemos política, sino? Yo me afilié en 2001 con una idea. No fue para estar por estar, ni para ser uno de esos profesionales de la política que van de un lado a otro. Creo que es un momento donde hay que apostar a eso, porque la gente lo va a terminar valorando, antes o después.
— Las conclusiones que se sacaron de estos primeros rounds electorales hablan de que es imposible nacionalizar.
Yo creo que fue al revés. Esa imagen se dio con la elección en Capital. En las otras cinco elecciones ganaron los gobernadores, se ganaron los territorios. El cambio en la mirada se dio a partir de que en Capital todas las elecciones se nacionalizan. Y ese es el peligro de que Cristina sea candidata: que nuestra elección se nacionalice y perjudique la discusión de lo bonaerense.
— Si se da esta candidatura de Cristina, sería en la Tercera Sección. ¿Vos creés que va a irradiar a todo el resto de la provincia?
Obvio que sí. Ella es una figura nacional, no hay manera de remitir a una discusión local cuando tenés la figura que ha dominado los últimos 15 años. Su figura la excede, aún cuando ella no quisiera —que va a querer—. Esta apuesta tiene que ver con sostener un proyecto nacional desde la provincia. Ella no va a querer localizar la elección, y es una lástima para la provincia y para la Tercera.
Además, me parece mal que alguien pueda pasar de sección en sección. Ella no va a representar territorialmente a la Tercera.
— Se subestima el factor de representación territorial en Buenos Aires. Hay una discusión que hace falta, ¿no?
Una enorme discusión. Y el desdoblamiento es un paso hacia adelante. Por eso creo que la figura de Cristina retrasa esa discusión. Imagino que algo se va a dar en el resto de las secciones, pero sin ella habría sido más fácil. También creo que para la próxima elección hay que sostener el desdoblamiento; Buenos Aires tiene que discutirse a sí misma.
— ¿Qué mirada tenés del momento que atraviesa el peronismo?
No soy quién para hablar de peronismo, lo veo como un actor político y con todo respeto por los compañeros. Entiendo que, ante la sociedad, están viviendo una crisis parecida a la que atravesó la UCR en 2001 y la van a vivir los próximos años. No se van a poder sacar de encima algunas discusiones que existen.
— Por la falta de credibilidad, en función de haber defraudado tanto, se acabó el crédito…
Lo interpreta así la sociedad. Está pasando eso, y ese descrédito viene de que no tienen identidad propia. Pasaron del menemismo de los ’90, neoliberalismo, a un supuesto socialismo durante el kirchnerismo, sin solucionar los problemas de la gente.
UCR en ebullición
— En La Plata se ensaya una construcción de centro, a pesar de los análisis de algunos gurúes, y también provincializando la elección, que es otra cosa que no se ve. ¿Cómo lo ves y qué posibilidad hay de llevarlo a otras secciones?
Está bien que la gente que hace marketing opine, y uno puede escucharlos. Pero en la política de construcción de lo que viene, el radicalismo y otros partidos observan que hay que construir un espacio diferente.
En la crisis que tiene el peronismo, el radicalismo tiene que volver a sus bases, que son representar a los más vulnerables. En los gobiernos del interior, cuando el radicalismo gobierna, las obras se llevan adelante para los más vulnerables, que a veces no son los que nos votan. Creo que hay que recuperar esa identidad.
A veces se dice que la UCR representa a la clase media, media alta. La clase media se siente representada porque un buen gobierno radical, en el poder, busca equidad. Hay que recuperar que los más vulnerables se sientan representados por el radicalismo, porque el peronismo los ha defraudado.
— ¿Se puede copiar esta construcción en otras secciones?
Hay que buscarlas en toda la provincia. Cada sección construirá después según su particularidad, pero la identidad tiene que ser bonaerense.
— Esta no es una postura unánime de la UCR…
Siento que es una postura inmensamente mayoritaria en todos los comités. Después puede haber otros dirigentes buscando otras salidas, pero el dirigente del territorio no tiene que ver con ninguno de los dos populismos. Nosotros tenemos que pararnos en otro lugar.
— ¿Y cómo se resuelve esta discusión?
Creo que, en primer lugar, se va a dar en los próximos días, debido a que el Comité de la Provincia de Buenos Aires va a tener que tomar una postura sobre cuáles son las visiones mayoritarias. De ahí se van a terminar dando las construcciones. Lo que sucedió en La Plata es un sentir para toda la provincia. Había gente del GEN, dirigentes del PRO que no están cómodos con La Libertad Avanza, y eso va a decantar.
— Además percibo que hay una continuidad con Juntos por el Cambio. No es nuevo, no es coyuntural. Vienen laburando parecido o cerca en los últimos 10 años.
Hay que encontrar distintos actores, dirigentes que planteen una misma forma de gobernar, porque en algún momento nos va a tocar, para que sea en conjunto, sin que un partido sienta mayoritariamente el poder y deje afuera a los demás. Ese fue el principal error del PRO: creer que son los únicos garantes del gobierno nacional y provincial. Ese fue también el motivo de la derrota: no haber escuchado al resto de los partidos.
— Algunos radicales lo creyeron.
Ninguno lo creyó. A algunos les convenía. Esto no va a volver a pasar. Depende de que los militantes no bajemos los brazos y podamos construir algo más positivo. El PRO también está en un período en el que se determina su desaparición. Si terminan a la cola de LLA, van a estar más cerca de desaparecer que de una nueva construcción.
El escenario de la cuarta sección electoral
— ¿Cómo viene la Cuarta?
En la Cuarta, si se reedita Juntos por el Cambio, hay posibilidades de ganar. Si no, habrá que ver cómo va a ser el acuerdo. Sería una lástima no poder lograrlo, pero es una decisión que nos excede.
— ¿Qué significa la foto con Britos?
Una foto con un vecinalista para ir a charlar y ver qué posibilidades hay de armar un armado seccional. (El intendente de Chivilcoy, Guillermo) Britos tiene un partido distrital, que es importante para la Cuarta, porque es el segundo distrito con más habitantes. Sería bueno confluir en un acuerdo, y por ahora son conversaciones.
— ¿El nombre de Flexas está disponible como candidato?
En septiembre tienen que estar los que tengan ganas y sean más apetecibles para la sección. Depende justamente de lo que pase con el PRO. No lo veo a Flexas en septiembre. Veremos qué pasa en octubre. Hay que trabajar.