El paisaje de la laguna de San Vicente, un atractivo natural y turรญstico de la provincia de Buenos Aires, volviรณ a ser dominado por una problemรกtica recurrente: los camalotes, esas plantas invasoras que cubren su superficie en mรกs del 50%.
Aunque este problema es conocido desde hace mรกs de una dรฉcada, la falta de funcionamiento de la maquinaria especรญfica para su limpieza agrava la situaciรณn.
Hoy, el agua apenas se insinรบa bajo el espeso manto verde de los camalotes.
La ‘mรกquina’ destinada a la limpieza, apodada โla lanchitaโ por los sanvicentinos, lleva meses fuera de servicio debido a una averรญa en su bomba hidrรกulica. Sin ella, los camalotes se multiplican rรกpidamente con el reverdecimiento que implica la primavera.
El municipio, que habรญa confiado en esta ‘herramienta’ para mantener despejada la laguna, aรบn no logra repararla, dejando en pausa un sistema que parecรญa haber dado buenos resultados.
Un problema que se arrastra en la laguna
El drama comenzรณ en 2013, cuando esta especie invasora se instalรณ en la laguna, expandiรฉndose sin control.
Desde entonces, las plantas cubrieron grandes porciones del espejo de agua, alterando no solo su aspecto, sino tambiรฉn su ecosistema y atractivo turรญstico.
En 2022, tras varios intentos fallidos durante gestiones anteriores, se llevรณ a cabo una limpieza integral que retirรณ cerca de 2.000 toneladas de camalotes, con retroexcavadoras, dejando la laguna despejada por un tiempo.
Sin embargo, la sequรญa histรณrica de 2023 vaciรณ completamente el cuerpo de agua, lo que tambiรฉn eliminรณ temporalmente las plantas.
El panorama cambiรณ con las lluvias asociadas al fenรณmeno de ‘El Niรฑo’, que devolvieron los niveles de agua a la laguna, pero tambiรฉn permitieron el retorno de los camalotes.
Ante esta situaciรณn, se puso en funcionamiento la mencionada โlanchitaโ, diseรฑada para cortar y retirar las plantas de manera regular. Su efectividad quedรณ demostrada en los pocos meses que operรณ, hasta que una averรญa mecรกnica la dejรณ fuera de servicio.
Efectos sobre turismo y economรญa de San Vicente
La proliferaciรณn de los camalotes no es solo un problema estรฉtico. Al impedir actividades como la pesca y el remo, afecta directamente al turismo, una fuente clave de ingresos y empleo para la regiรณn.
En los รบltimos aรฑos, San Vicente se posicionรณ como un destino accesible para escapadas breves dentro de la provincia, pero el estado actual de la laguna desincentiva las visitas.
Ademรกs, la falta de mantenimiento regular amenaza con perpetuar un cรญrculo vicioso. Sin una intervenciรณn eficaz y sostenida, las plantas seguirรกn dominando el paisaje, deteriorando aรบn mรกs el atractivo del lugar.
ยฟAyuda de la provincia con maquinaria?
Aunque la problemรกtica recae directamente sobre el municipio, cabe preguntarse si la provincia de Buenos Aires podrรญa intervenir en el mantenimiento y reparaciรณn de la maquinaria necesaria.
Un apoyo provincial no solo aliviarรญa las arcas municipales, sino que tambiรฉn garantizarรญa la preservaciรณn de un espacio natural que tiene valor para toda la regiรณn.
Cronologรญa de un conflicto verde
2013: Aparece la especie invasora que comienza a cubrir el espejo de agua.
2015-2019: Se implementan medidas para controlar los camalotes, pero sin รฉxito.
2022: Se realiza una limpieza integral que retira todas las plantas invasoras.
2023 (comienzo): Una sequรญa extrema deja la laguna sin agua y, por ende, sin camalotes.
2023 (primavera): Las lluvias restablecen el nivel del agua, y se pone en marcha una mรกquina para retirar camalotes regularmente.
2024: La mรกquina se averรญa y no se ha reparado, lo que permite el retorno masivo de los camalotes.
La lucha por recuperar y mantener la laguna como un espacio disfrutable sigue siendo una tarea pendiente. Habrรก que esperar a que โla lanchitaโ regrese a sus funciones para devolverle al espejo de agua el brillo que merece.
Fuente: El Diario Sur.