Entre lágrimas, Verónica Ojeda, madre de Diego Fernando -el hijo menor de Diego Armando Maradona– recordó el último día que vio con vida a su expareja. Fue el 23 de noviembre de 2020, dos días antes de su muerte.
“Tenía feo olor, había olor a baño”, declaró Ojeda, de 46 años, ante el Tribunal Oral en lo Criminal N° 3 de San Isidro. Su testimonio estuvo atravesado por la emoción, sobre todo al hablar de la relación entre su hijo -quien tiene un trastorno del habla y autismo- y su padre.
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Según contó, ese último encuentro fue en la casa alquilada en el barrio privado San Andrés, en Benavídez. Allí notó que Maradona se encontraba hinchado y “desfigurado”. “Lo quería llevar a otro lugar porque Diego no estaba bien. Alguien tenía que hacer algo. Yo me lo quería llevar, no quería que esté en ese lugar con esas condiciones, con ese olor a pis y otras cosas. Es horrible vivir así”, expresó.
Ojeda no pudo contener el llanto durante la audiencia. “El último día que lo vi estaba solo con un custodio. No estaba [Leopoldo] Luque, no estaba [Agustina] Cosachov y no estaba [Carlos] Díaz”, señaló. Los tres profesionales están entre los siete acusados por homicidio simple con dolo eventual.
Luego, al ser consultada por el abogado Fernando Burlando, que representa a Dalma y Gianinna Maradona, fue aún más precisa: el olor era de “pis” y “caca”. “Por eso le pedí que se bañara, que se afeitara. No estaba en condiciones para que lo viera Diego Fernando. Él me dijo: ‘Quedate tranquila, te prometo que me voy a bañar y afeitar para mi hijo’. Ese fue el último día que lo vi con vida”, relató.
La declaración continuará el jueves próximo a las 9.30.