Hace una década, al calor de una recién sancionada Ley de Medios, el Grupo Cielo parió una utopía: creó un canal de televisión, bonaerense de pura cepa, para hablarles a los ojos a los millones de habitantes de la provincia de Buenos Aires. Una señal informativa, gratuita y local, que no le daba cabida a los embotellamientos de la avenida 9 de Julio o de los paros de los metrodelegados del Subte porteño, que colonizan la pantalla y poco importan a los vecinos de Pehuajó, Bahía Blanca, Olavarría, San Clemente del Tuyú o Magdalena. Se llamó QM Noticias, y enfrentó una pelea desigual hasta el final.
Hizo falta una inversión grande, mucha voluntad, el entusiasmo de decenas de periodistas, camarógrafos y técnicos para poner en marcha ese sueño. Y se consiguió, se hizo, aunque pronto quedó demostrado que la Ley de Medios (Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, 26.522) era demasiado buena para ser cierta.
QM cumplió desde el vamos con las tres condiciones que imponía la Ley para ser incluida tanto en las grillas analógicas como las digitales de todos los sistemas de tv por cable que operaran en la Provincia. Era una señal de carácter local, al producirse y emitirse desde la ciudad de La Plata, era netamente informativa y relacionada con los hechos y habitantes de la Provincia de Buenos Aires. El Grupo Cielo envió decenas de decodificadores a todos los puntos de la Provincia y los pequeños cables locales fueron, de a poco, sumándola a su programación.
Pero los dueños de la tele -los grandes, los poderosos, los tipos que deciden de qué cosas te enterás y de qué no- rechazaron una y otra vez hacerle un lugar en la grilla a QM. Ignoraron las disposiciones de la Ley y cada una de las resoluciones del AFSCA/ENACOM: la 1.394, la 9.229, la 1.645. El ejemplo perfecto de un estado Estado bobo que emite resoluciones pero no puede (o no quiere) hacerlas cumplir.
Así, QM Noticias se fue quedando sin pantalla. Y un canal sin pantalla se muere.
Así, los bonaerenses se fueron quedando sin su último hilo de voz.
QM Noticias, la utopía de un canal de noticias bonaerense
Bien lo sabían Cablevisión, DirecTV, Telecentro, TeleRed; lo sabe hasta Darío Micheletti, el nefasto secretario General del SATSAID de La Plata, jugador estrella de su patronal. También Martín Sabbatella, que presidió el AFSCA, autoridad (la palabra autoridad le quedó inmensa) de aplicación de la Ley de Medios. Y los que le siguieron al frente de ENACOM: Miguel de Godoy y Silvana Giúdici, operadora estrella de Clarín.
Entre los funcionarios cómplices e inútiles, Hernán Lombardi, secretario de Medios del macrismo, se merece el cuadro de honor. Desde su lugar no sólo bloqueó los reiterados pedidos del Grupo Cielo para que QM tuviera pantalla en la TDA, a pesar de que, como en el caso de las grillas privadas, cumplía con todos los requisitos, sino que habilitó en tiempo récord y sin mayores trámites ese beneficio para La Nación+. Por entonces pocos sabían, aunque sospechaban, que la sociedad entre ese medio y el gobierno de Mauricio Macri excedía largamente lo ideológico.
Al Grupo Cielo no le quedó otra que reclamar sus derechos ante la Justicia Federal. Un terreno en el que sus verdugos se mueven como peces en el agua.
Una batalla desigual en la Justicia
El primer fallo a favor del Grupo Cielo llegó en octubre de 2014. Fue una medida cautelar dictada por el juez federal Adolfo Gabino Ziulu. En el texto el magistrado ya advertía que la negativa de Cablevisión a incorporar la señal a la grilla ponía “en peligro las fuentes de trabajo de todas las personas que allí se desempeñan”. A Micheletti y al SATSAID no les importó y continuaron una guerra sin cuartel contra el canal que empleaba a sus afiliados.
QM resistió tres años más. Pero no le alcanzó el tiempo. Asfixiado económica y financieramente, dejó de emitir su señal a finales de 2017, cuando el macrismo -socio de sus verdugos- pasaba su mejor momento. “La Justicia que es lenta no es justicia”, suele decirse, y esta vez no fue la excepción.
Recién el 6 de agosto de 2019 un juez resolvió la “cuestión de fondo”. Una semana más tarde, Mauricio Macri y María Eugenia Vidal sellarían su suerte en las urnas. En primera instancia, la Justicia Federal dictaminó que Cablevisión debía incluir en su grilla a QM Noticias en un plazo máximo de diez días.
Así era el canal de noticias del Grupo Cielo, QM Noticias
Cablevisión, con todos los recursos a su disposición, apeló la medida y le puso suspenso a la definición. Otra vez a esperar: dos años para que la Cámara Federal de La Plata confirmara la resolución de primera instancia.
Transcurrieron más de 3 años y 3 meses desde que la señal de QM Noticias se apagó. Exactamente 1.204 días. La Justicia nos dio la razón, una vez más, pero en el Grupo Cielo siempre lo supimos: a QM Noticias lo mataron a sangre fría.
El póstumo grito de la Justicia
La Sala I de la Cámara Federal de La Plata, integrada por los jueces Álvarez y Lemos Arias, acaba de fallar a favor del Grupo Cielo, ratificando la sentencia de primera instancia que obliga a Cablevisión a incluir en su grilla a QM Noticias, a pesar de que dicha señal no se emite más.
La Cámara Federal desestimó los argumentos de Cablevisión, que invocó derechos “de propiedad y libertad de prensa” para incumplir la normativa. “No pueden prosperar, por cuanto esa interferencia debe ser entendida como una regulación dispuesta por un organismo competente, altamente especializado sobre el tópico (ENACOM), y en uso de sus facultades”, advirtieron.
Los jueces opinaron que QM Noticias es (o era) “un medio idóneo para que los habitantes bonaerenses vean fortalecido su derecho de acceder y recibir información de índole local, incentivando y promoviendo el debate democrático”.
Una pena. No sólo para el Grupo Cielo -que a la fecha sigue afrontando los pasivos que le generó funcionar a pérdida, sin pantalla y sin poder publicitar durante años– , no sólo por las fuentes laborales perdidas, sino también por las voces bonaerenses, nuevamente acalladas. Hay que decirlo: al poder, al poder real, le interesa que la Provincia más potente del país sea sometida. La mordaza mediática es sólo una parte de su plan.