Viviam Perrone, integrante de la Asociación Madres del Dolor y de la Asociación Internacional de Víctimas de Tránsito, pidió que las capacitaciones para obtener y renovar licencias de conducir sigan siendo obligatorias.
Ante la alarmante cantidad de muertes y lesiones por accidentes de tránsito, crece la preocupación por el cumplimiento de las normas de tránsito y la capacitación de los conductores. Expertos y organizaciones civiles insisten en que mantener las capacitaciones obligatorias y los controles es clave para reducir la inseguridad vial en el país.
“Con las cifras tremendas de muertos viales y lesionados que tenemos, nos falta mucho para poder tomar una decisión voluntaria”, sostuvo Perrone. Durante una visita al predio de la Fundación Profesional para el Transporte (FPT), en Escobar, enfatizó la importancia de mantener los controles en rutas y calles para reducir la siniestralidad vial.
¿Qué es Madres del Dolor?
La trágica muerte de su hijo en 2002, quien fue atropellado y abandonado en Vicente López, convirtió a Perrone en una militante activa por la seguridad vial. En 2004 fundó Madres del Dolor junto a otras mujeres que también perdieron a sus hijos de manera violenta. Desde entonces, se dedicó a visibilizar los peligros del tránsito irresponsable y a promover la educación vial como un factor clave en la prevención de accidentes.
“Que exista la obligatoriedad para obtener la licencia de conducir profesional hace que, de a poco, el tema de la responsabilidad vial se incorpore en la sociedad, como pasó con el cinturón de seguridad”, reflexionó Perrone. Sin embargo, destacó que aún queda mucho por hacer en otros aspectos, como el cumplimiento de la ley de alcohol cero y la prevención de distracciones al volante.
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En su visita a la FPT, recorrió los distintos departamentos y probó simuladores de camiones, utilizados en las capacitaciones prácticas de choferes. Si bien la actividad se dio en el marco de FADEEAC, organización que impulsa la profesionalización del transporte, Perrone insistió en que la capacitación no es solo para choferes, sino para todos los que circulan por las calles y rutas del país.
“Cada muerte vial destruye una familia. El dolor que provoca la pérdida de un ser querido en un accidente de tránsito no pasa nunca”, concluyó Perrone, aludiendo a la necesidad urgente de reforzar la capacitación y control en la seguridad vial.
Perrone destacó que las capacitaciones deben seguir siendo obligatorias, ya que “vivimos en sociedad y compartimos las rutas con otros”. Además, enfatizó que los controles son clave para garantizar la seguridad en el tránsito.
FADEEAC y su Fundación Profesional para el Transporte (FPT) trabajan desde hace años en la profesionalización del transporte de cargas, ofreciendo capacitaciones y evaluaciones psicosensométricas a conductores. A través de su red nacional, buscan mejorar los estándares de seguridad vial en rutas y garantizar que los choferes estén preparados para operar bajo estrictas normas de seguridad.
