La salida de Matías Abaldo entró en la etapa de los detalles. Después de la bomba de la semana pasada, en la que el jugador se ausentó de la concentración y luego terminó diciendo que quería jugar en Defensor, ahora las partes trabajan para intentar ponerse de acuerdo en la formalidad de la desvinculación.
La situación está planteada. Abaldo quiere jugar en Defensor, a Gimnasia no vuelve y ahora el representante del jugador y los dirigentes de ambos clubes trabajan para instrumentar un pase impensado hace 10 días. Demás está decir que al día de hoy lejos están de ponerse de acuerdo…
Los directivos de Gimnasia no ocultan su fastidio por la situación. El chico, al que el club entendió y contuvo desde que mostró los primeros síntomas de depresión, decidió irse de la concentración sin avisar y no se supo nada de su paradero durante varias horas, a tal punto que la preocupación de la delegación albiazul fue extrema. Luego, pudieron certificar su paradero tras una comunicación con su representante.
Posteriormente se enteraron de la decisión de no volver cuando Abaldo hizo públicos sus pensamientos. A partir de allí, los directivos procesaron la información y trabajan para generar una salida que sea lo más ventajosa posible para el club.
Cómo es la situación de Abaldo con Gimnasia
Aquí es donde aparecen los inconvenientes. Gimnasia compró el 50% del jugador en 1.600.000 dólares, de los cuales ya pagó 600.000. En noviembre pidió una prórroga ya que debía pagar una cuota de 500.000 dólares más, cosa que Defensor aceptó ya que entendieron que varios clubes también le adeudaban pagos al Lobo de diferentes jugadores (Huracán por Ramírez, Banfield por Rodríguez y Argentinos por Lescano).
Y ahora es el momento de negociar. En Gimnasia quieren recuperar parte del dinero invertido y confiar en que la recuperación de Abaldo les permitirá hacer parte del negocio pensado al momento de edificar financieramente su compra. Además, el club debe salir a buscar un reemplazo en una posición en la que, inicialmente, no pensaba incorporar.
Así planteadas las cosas, está claro que no será una definición sencilla aunque la historia parece escrita: Abaldo jugará en Defensor. Pero ojo, no ser´tan fácil como dijo su representante ya que de por medio hay varios temas económicos por definir.