Intendentes referenciados con el núcleo “ultra K” salieron, al unísono, a agradecer a Axel Kicillof y a la Legislatura la condonación de las deudas contraídas durante la pandemia. En el marco de las cada vez más evidentes tensiones entre el camporismo y el kicillofismo, la jugada provocó un tsunami de dudas.
“Agradecemos al ejecutivo provincial y a la legislatura bonaerense condonar las deudas que los municipios mantenían con la Provincia”, se aventuró Mayra Mendoza, de Quilmes, desde la red social X (Ex Twitter), sin arrobar (mencionar) a Kicillof.
“Muchas gracias a nuestro gobernador y a la legislatura bonaerense por el proyecto presentado para condonar las deudas que los municipios mantenían con la Provincia”, se sumó, desde Merlo, Gustavo Menéndez. Con un tuit casi calcado, Leo Nardini, de Malvinas Argentinas, le dio más volumen al extraño clamor.
Un clamor o una ironía
¿Por qué extraño? Es que, si bien es cierto que el proyecto dio un paso clave dentro de la Cámara de Diputados, al obtener aprobación de Asuntos Municipales, Legislación General y Presupuesto e Impuestos, lo cual dejaría habilitado el tratamiento en el recinto, todavía está lejos de conseguir su sanción.
Tan rara y forzada se percibió la jugada, que el grupo de intendentes debió reforzar su mensaje con un poco de off ante el desconcierto general. “Agradecemos el tratamiento en la comisión, y sabemos de la voluntad del gobernador de condonarlo, porque así nos lo dijo en una reunión que tuvimos los intendentes”, tradujeron.
En Casa de Gobierno estallaron los detectores de ironías. Rápidamente decodificaron el mensaje del kirchnerismo en clave de “apriete”. “Lo que están diciendo es que van a aprobar la condonación de la deuda sin hablar con nosotros”, explicaron, aunque esta vez no mostraron signos de alarma.
Es cierto que el “perdon financiero” se viene reclamando en los últimos años, y que fue incluido en el marco de las negociaciones por la Ley de Presupuesto para 2025, que no se aprobó. Sin Presupuesto, sin Endeudamiento y sin Impositiva, la “deuda Covid” -que se empezó a pagar hace poco, en 18 cómodas cuotas- siguió vigente.
El Gobierno provincial tenía la expectativa la amnistía se diera por ley -a pesar de que podría haber salido por decreto- y “en el marco de las necesidades del Ejecutivo”. Incluso desde el oficialismo no tan oficialista admitieron, ante la consulta de INFOCIELO, que la idea era “tratarlo en conjunto” con el Presupuesto y el Endeudamiento. Gracias a la jugada de La Cámpora, Kicillof se queda sin una carta para negociar su propia agenda frente a la oposición.
El Gobernación dejaron trascender, además, que el Ejecutivo trabajaba en su propio proyecto de perdón, para presentarlo una vez que se saldaran los debates electorales. Esa instancia parece próxima luego de la intervención de la Junta Electoral de esta misma tarde, en la que se reclamaron plazos extensos para resolver los desafíos burocráticos que implicará la organización de las elecciones de septiembre.
Fuentes del oficialismo oficialista se mostraron con semblante optimista frente a la posibilidad de que La Cámpora y los bloques opositores accedan al pedido del Ejecutivo y de la propia Junta. Podría haber acuerdo, sí, pero ya se abrió otro frente para tensionar.