Un video grabado con cámara oculta y difundido por el canal C5N reveló un hecho de enorme gravedad institucional: el ministro de Justicia de la Nación, Mariano Cúneo Libarona, le ofreció al activista estadounidense Tim Ballard su asistencia personal para gestionar reuniones con jueces, influir en el Congreso Nacional e interceder ante medios de comunicación argentinos con el fin de limpiar su imagen pública.
El encuentro tuvo lugar en la ciudad de Nueva York y quedó registrado en dos grabaciones que se viralizaron en las últimas horas. Allí se escucha con claridad cómo Cúneo Libarona se refiere a la posibilidad de “cambiar ese malentendido que hubo en nuestro país” respecto de la figura de Ballard, un ex agente federal que inspiró la película Sonido de Libertad y cuya actuación ha sido objeto de fuertes críticas, denuncias de abuso y cuestionamientos éticos.
“Yo te consigo medios. Puedo hablar con Rolando, para armarte algo lindo”, expresa el ministro en la filmación, en una aparente referencia al periodista Rolando Graña. Pero el tramo más preocupante del video llega cuando Cúneo Libarona le promete a Ballard reuniones con miembros del Poder Judicial. “Te podría conseguir algunas reuniones con jueces de distintos ámbitos”, le dice. Además, afirma estar redactando un proyecto de ley vinculado a la temática del activista y anticipa que se lo hará llegar antes de su envío al Congreso. “Lo escribí el fin de semana después de ver tu película”, agrega.
Ballard, por su parte, se muestra dispuesto a colaborar con el funcionario argentino: “Lo que quiero yo es servirle a usted, como puedo ayudarles”, expresa. Cúneo Libarona le responde con detalles sobre una supuesta reforma penal que incluiría figuras delictivas nuevas, algunas creadas por él mismo, y que, según afirma, busca unificar criterios para combatir delitos transnacionales.
El contenido del segundo video complica aún más al ministro. En tono distendido, Cúneo Libarona rememora sus viajes de juventud a Chile durante la dictadura militar y lanza un comentario machista: “Lo mejor que tiene Chile son las chilenas”. Luego amplía: “Nosotros para enganchar una chilena teníamos que ir temprano y apurar, porque a las 12 se acababa, pero las chilenas eran fantásticas”. La frase, celebrada con risas por Ballard, desató críticas por su connotación sexista y por banalizar un régimen dictatorial.
La revelación golpea con fuerza al gobierno de Javier Milei, que construyó su identidad política sobre la denuncia a “la casta” y la promesa de terminar con los privilegios y la corrupción. La actitud del ministro de Justicia, ofreciendo gestiones personales en nombre del Estado argentino a un particular extranjero, no solo contradice ese discurso, sino que podría tener implicancias legales y diplomáticas.
Hasta el momento, ni Cúneo Libarona ni el presidente Milei se pronunciaron públicamente sobre el escándalo. Sin embargo, el video ya circula en redes sociales y medios de comunicación nacionales e internacionales, donde se multiplican los cuestionamientos a la conducta del funcionario.