El Gobierno Nacional está atravesando días difíciles en lo político. Solo ayer, la Cámara de Diputados de la Nación logró aprobar una serie de proyectos que ponen en jaque sus planes de ajuste. Paralelamente, en las calles aledañas al Congreso se juntó una multitud para hacerle varios reclamos a la administración libertaria. ¿Del laberinto se sale por arriba?
Esa parece ser la respuesta que encontraron en Casa Rosada ya que en medio de esta crisis decidieron reflotar el Consejo de Mayo creado en julio del año pasado luego de la firma del llamado Pacto de Mayo (que se firmó en julio). Efectivamente, a través del Decreto 617/24 publicado este jueves, el presidente de la Nación, Javier Milei, designó a los integrantes de dicho Consejo con la idea de ponerlo a funcionar.
Vale recordar que el “órgano colegiado consultivo” está compuesto por un presidente y seis consejeros (uno del Poder Ejecutivo, uno de las provincias que firmaron el Pacto de Mayo, dos del Congreso, uno de los sindicatos y uno de las empresas.
Quiénes integran el Consejo de Mayo libertario
- Por las provincias Alfredo Cornejo (gobernador de Mendoza).
- Por el Senado Carolina Losada (UCR).
- Por Diputados Cristian Ritondo (PRO).
- Por los sindicatos Gerardo Martínez (UOCRA).
- Por las cámaras empresarias Martín Rappallini (UIA).
A estos integrantes se le suma María Cecilia Domínguez Diacoluca quien fue designada como secretaria técnica. Su rol será organizar y convocar a las reuniones del consejo que, según la normativa del año pasado, debería sesionar al menos una vez por mes.
Los puntos del Pacto de Mayo
La idea del Consejo de Mayo es generar las políticas públicas necesarias para poner en práctica los lineamientos que quedaron oficializados en el texto del Pacto de Mayo. Vale recordar que el documento fue firmado por 18 gobernadores y que Axel Kicillof, como representante de la provincia de Buenos Aires, fue uno de los ausentes.
- La inviolabilidad de la propiedad privada.
- El equilibrio fiscal innegociable.
- La reducción del gasto público a niveles históricos, en torno al 25% del Producto Bruto Interno.
- Una reforma tributaria que reduzca la presión impositiva, simplifique la vida de los argentinos y promueva el comercio.
- La rediscución de la coparticipación federal de impuestos para terminar para siempre con el modelo extorsivo actual.
- Un compromiso de las provincias de avanzar en la explotación de los recursos naturales del país.
- Una reforma laboral moderna que promueva el trabajo formal.
- Una reforma previsional que le dé sustentabilidad al sistema, respete a quienes aportaron y permita, a quienes prefieran, suscribirse a un sistema privado de jubilación.
- Una reforma política estructural que modifique el sistema actual y vuelva a alinear los intereses de los representantes y los representados.
- La apertura al comercio internacional, de manera que la Argentina vuelva a ser una protagonista del mercado global.