En la temporada 1994/95 de la B Nacional el plantel de Estudiantes se despachó con una campaña histórica, para volver rápidamente a Primera División. A lo largo del torneo la dupla de Eduardo Manera y Miguel Ángel Russo utilizó a 32 futbolistas.
El plantel estuvo compuesto por 4 arqueros, 8 defensores, 12 mediocampistas y 8 delanteros. En total fueron 30 los que vieron minutos en cancha, ya que dos de los arqueros no llegaron más allá del banco, y ellos fueron Gastón Sessa y Carlos Andersen.
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El futbolista que más partidos disputó en aquel grupo fue Juan Manuel Llop, quien contabilizó 41 partidos disputados y solo se perdió la fecha final ante Rafaela. La particularidad del Chocho tuvo que ver con que, siendo mediocampista, se adaptó a jugar de líbero.
Por detrás del futbolista de mayor recorrido por entonces en ese plantel se ubicaron el uruguayo Leonardo Ramos con 40 presencias, y José Luis Calderón y Rubén Capria con 39. Luego siguieron Manuel Aguilar y Juan Sebastián Verón con 38.
A excepción del compañero de ataque de Caldera, los otros diez titulares en ese equipo salieron prácticamente de memoria y no sorprende que Claudio París (37), Edgardo Prátola (35) y Ricardo Rojas (34) también hayan finalizado con la mayoría de los partidos disputados.
El único caso con varias ausencias entre los diez inamovibles fue el de Carlos Bossio, quien jugó solamente 29 de los 42 partidos del equipo, pero eso no se debió a que su titularidad estuviese en discusión, sino a sus recurrentes citaciones a la Selección durante 1995.
