Cuando los jugadores de Gimnasia se disponían a preparase para retornar al campo de juego del Estadio Coloso del Parque Marcelo Bielsa, se dio una situación insólita a pesar de la cual el plantel del Lobo con el entrenador, Sebastián Romero, a la cabeza, decidieron salir a jugar de igual manera el complemento.
Con los jugadores de Newell’s dentro del campo de juego y hasta la terna arbitral encabezada por Darío Herrera, los jugadores de Gimnasia tardaron más de la cuenta en volver, y allí fue cuando se conoció la noticia de que ingresó gas pimienta al vestuario producto del accionar de la policía rosarina debido a unos disturbios ocasionados en la zona.
Esto sorprendió a los jugadores que no podían creer lo que estaban viviendo. Al ponerse en conocimiento de esta situación, Darío Herrera consultó el estado de los jugadores para saber si se jugaba el segundo tiempo. Con el okey del plantel del Lobo más allá de la bronca por el momento vivido, se siguió jugando el partido.
Además del árbitro del partido, también fueron informados y notificados los jugadores de Newell’s de esta situación en pleno campo de juego, y tampoco podían creer lo sucedido. Tras una charla de capitanes entre Leonardo Morales y Lucas Hoyos, se dio comienzo al complemento.