Una fuerte presión de las grandes cerealeras y entidades del campo nacionalizaron la discusión de la Ordenanza Fiscal Impositiva 2025 en Necochea. Es que además de las actualizaciones habituales de servicios (Urbanos, Rurales o Seguridad e Higiene) entraron a la discusión dos tipo de “tasas viales” solidarias resistidas por estos sectores económicos.
Una de ellas es la denominada “Tasa vial a los combustibles”, que se remontan a aquella polémica instalada entre 2013 y 2015 cuando intendentes del Frente Renovador gravaron la compra de combustibles a través del cobro de un tributo para obras y mantenimiento de las redes viales municipales. Muchas de ellas fueron judicializadas y regresaron con la llegada al poder de Javier Milei a muchos distritos que sufren la caída de coparticipación y arrastran problemas de caja para garantizar los servicios esenciales.
La segunda, tiene un origen y una historia marcadamente local. Se trata de la “Tasa solidaria mantenimiento diferenciado de la red vial” o más comúnmente conocida como “Tasa portuaria” para todos los camiones que entren o salgan de Puerto Quequén.
En Necochea, ese tributo se cobró en el distrito entre 2015 y 2017 a vehículos automotores que circulaban hacia el Puerto con cargas superiores a los 3500 kg. Impulsado por el por entonces intendente Facundo López (Frente Renovador) fue judicializado por el Centro de Exportadores de Cereales y la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina y se dejó de cobrar en 2018 a partir de una resolución favorable del Juzgado en lo Contencioso Administrativo del Departamento Judicial Necochea.
Tras años de espera, la Cámara de Apelación en lo Contencioso Administrativo de Mar del Plata revirtió el fallo en 2024 y convalidó la validez de la ordenanza. Pese a ello, el municipio que conduce el actual intendente vecinalista Arturo Rojas no reestableció el cobro- incluso en su época de opositor estaba en contra- pero ahora acompañó un proyecto de Unión por la Patria para crear una tasa similar a la mencionada.
La discusión se enmarca, además, en las disputas por la concesión de la Terminal de Quéquen que ya había disparado un nuevo foco de conflicto con entidades rurales y cerealeras
Marcha atrás con la Tasa a los combustibles en Necochea tras una fuerte presión nacional
El proyecto del Ejecutivo municipal buscaba la creación de una tasa vial a los combustibles al gravar con un 3% sobre las ventas de nafta, gasoil y GNC en las estaciones de servicio. Los fondos recaudados iban a ser destinados al arreglo y mantenimiento de la vía pública.
Pero la posibilidad fue abiertamente rechazada desde las entidades rurales. El repudio no solo llegó de la Sociedad Rural de Necochea sino desde Coninagro: “No estamos de acuerdo con la creación de nuevos tributos, con fines meramente recaudatorios y entendemos que puede ser por no bajar el excesivo gasto público, que termina pagando el contribuyente de una u otra manera. Esperamos que los miembros del Concejo Deliberante en la provincia de Buenos Aires, que deben estudiar y aprobar esta Ordenanza, respeten el mandato recibido en las urnas” advirtió el presidente de la entidad, Elbio Laucirica.
Tras la fuerte presión de la dirigencia rural y la mediatización del caso a nivel nacional como ejemplo de la “voracidad fiscal” de los intendentes, Arturo Rojas ordenó retirar el proyecto.
Otro destino: La “Tasa Porturia” volverá a aplicarse en Necochea
Distinto fue el resultado para la “Tasa solidaria mantenimiento diferenciado de la red vial” o “Tasa portuaria” de Necochea, aún pese a la fuerte presión política y mediática de entidades de campo, acopiadores y exportadores.
En su exposición, Julián Kristiansen (UxP) explicó que “es un reclamo histórico que genera el deterioro por el uso intensivo del paso de carga del campo hacia un terminal portuario” y advirtió que, por ese motivo, el “ejido urbano recibe un impacto que hace muchísimos años no ha sido debidamente compensado”.
“Existe una asimetría muy grande entre los vecinos y la cadena exportadora. Los primeros utilizan los servicios en forma normal y los segundos en forma extraordinaria. El impacto no es el mismo. Genera deterioro, caos vehicular, alteraciones polvillos, deterioro de calles no asfaltadas donde nuestro municipio tiene que subsanar con recursos que son de todos” agregó.
En esa línea, dijo que el propósito es “reparar el daño histórico que genera la actividad” y en pensar a futuro en crear “una ruta segura de transporte de carga e para dejar de entrar de forma desornenada la puerto Quequen”.
Recordó que la Justicia “declaró constitucional y dictaminó que la contraprestación de servicio estaba debidamente comprobada cuando se implementó” y dijo que, en base a esa legalidad, se pretende generar “condiciones de igualdad e equidad entre la actividad exportadora y el ciudadano común de Necochea independientemente de quien gobierne” afirmó.
La tasa – que deberá ser convalidad por la Asamblea de Concejales y Mayores Contribuyentes- se aprobó por mayoría y con votación nomimal.