El triunfo de Estudiantes en Avellaneda no fue una victoria más. Por lo que se jugaba el equipo, por el momento del entrenador y por la visita a uno de los equipos más duros y poderosos del país, ganar hizo que el Pincha dé un golpe de autoridad sobre la mesa que hacía mucho tiempo no se veía.
El partido fue sumamente tensionante. Por lo anteriormente descripto y, principalmente, por la expulsión de Castro, que obligó al equipo a defender cerca de Muslera, una de las grandes figuras de la noche. A pesar de no haber pasado grandes sobresaltos, el equipo sabía que un mínimo error podía castigarlo y por eso el festejo del final se vivió de manera tan especial.
Pero si hubo alguien que vivió de manera muy especial la victoria fue el entrenador, Eduardo Domínguez. El Barba llegó tecleando al partido con Huracán y estas dos victorias consecutivas le dan aire a un ciclo que necesitaba reinventarse y de a poco lo va logrando.
Domínguez y un desahogo llenó de tensión
Cuando Sebatián Martínez Beligoy señaló el círculo central, Domínguez explotó. “Tomaaaa… Vamossssss”, gritó el técnico, apretando los puños y caminando cerca del banco de los suplentes, en filando para la mitad de la cancha.
La reacción, impropia de un tipo tan estructurado que se muestra, casi siempre, en modo zen, llamó la atención de quienes vieron la imagen. ¿Por qué hubo semejante reacción? ¿A quién fue dirigida? ¿Tan importante era la carga que traía el DT?
En la zona de conferencia, Domínguez no anduvo con vueltas y manifestó que el desahogo fue por el arbitraje. “El grito desaforado es por las que no te cobran. Es fácil mirar para el costado. Sentía que podría ser mejor el arbitraje. Todos nos equivocamos, pero siempre se equivocan para el mismo lado. Estamos acostumbrados a pelear contra esas situaciones. Casi no se puede hablar con los árbitros ya. En los últimos minutos hasta me transpiré. Por eso el desahogo, por haber ganado en una cancha muy difícil frente a un gran rival”, explicó.
¿La particularidad de la noche? No solo Domínguez se quejó del arbitraje. También lo hizo el técnico de Racing, Gustavo Costas: “Ya sabemos lo que pasa con los árbitros. Sabemos dónde estamos y qué está pasando… no voy a hablar del árbitro”.