El camino de Francia en el Mundial Qatar 2022inició con una contundente goleada sobre Australia, seleccionado ante el cual se impuso por 4-1 luego de arrancar en desventaja. La contundente victoria de los galos seguramente llevó tranquilidad en sus hinchas, no solo por las bajas por lesión que sufrió sino por “la maldición del campeón”.
En los últimos mundiales la defensa del título se convirtió en una verdadera tortura para los ganadores de las ediciones previas, ya que en la gran mayoría de los casos en cada copa posterior no solo no pudieron repetir sus actuaciones sino que se terminaron quedando al margen de la pelea en la ronda inicial.
Francia ganó en 1998 y en 2002 quedó afuera en fase de grupos, algo que también le sucedió a Italia (levantó la copa en 2006 y se despidió temprano en 2010), a España (campeón en 2010 y afuera en su zona en 2014) y a Alemania (festejó en 2014 y no consiguió superar la fase de grupos en 2018).
Cuatro de los cinco campeones entre 1998 y 2014 sucumbieron rápido en la edición siguiente y solo Brasil en 2006 consiguió evitarlo, aunque quedó eliminado en Cuartos de Final. Históricamente ha sido muy complicado para los seleccionados campeones del mundo tener una buena defensa.
Solo en dos ocasiones el campeón defensor pudo revalidar el título: Italia en 1938, luego de ganar la edición de 1934, y Brasil en 1962 después de conquistar también la de 1958. Argentina y Brasil estuvieron muy cerca de hacerlo: la Albiceleste ganó en 1986 y fue finalista en 1990, mientras que la Canarinha ganó en 1994 y perdió la Final en 1998.
Ahora los galos deberán sortear otra “maldición”, la de los goles del 9. ¿De qué se trata? Hasta ahora Francia nunca salió campeón si su delantero de área marcó goles, ya que en 1998 el 9 era Stephane Guivarc’h y el 2018 era Olivier Giroud y ambos terminaron en cero. En el Mundial Qatar 2018, sin embargo, el propio Giroud comenzó con un doblete.