Después de la expulsión ante Tristán Suárez y la agresión al árbitro Julio Barraza, a quien agarró del cuello luego de que le sacara tarjeta, todavía el golero de Villa San Carlos está esperando la sanción para saber cuántas fechas va a tener que purgar. Lo cierto es que después de lo sucedido el arquero está viendo el tema de su continuidad.
Hace algunas semanas ya lo había estado pensado, a sus 43 años, le pidió unos días a la dirigencia de Villa San Carlos para tener en cuenta un posible retiro. Lo cierto es que siguió, y ante esta nueva circunstancia, que todo depende de qué haya informado Barraza y cuántas fechas le den.
Cuando agredió a Sergio Pezzotta le habían dado diez fechas de suspensión, pero como todavía no salió el boletín oficial, no tiene novedades. Sin embargo, podría no pasarse por la cabeza el dejar el fútbol y continuar bajo los tres palos defendiendo la camiseta del Cele.
