Los jugadores más representativos de la Selección Dorada, como Manu Ginobili y Luis Scola o leyendas como Hernán Montenegro siempre se encargaron de pedir a gritos que se investigue a Germán Vaccaro, el ex presidente del básquet argentino que está siendo investigado por la Justicia desde 2014.
Desde el arribo de Federico Susbielles como interventor y luego como presidente electo la Confederación llevó a la justicia la causa contra Vaccaro que se llevó hasta las camisetas de la generación dorada cuando dio las hurras en su gestión que se destacó por el uso de la tarjeta para bienes personales, viajes y lencería de primer nivel.
— CABB (@cabboficial) August 29, 2019
En la causa la juez considera constituido el delito de defraudación en perjuicio de la CABB y la administración pública. “Hay abiertas algunas investigaciones de otro de delitos también que están incorporados en la causa», explicó el abogado de la confederación al sitio infopico.com.
Para definirlo el ex Selección y NBA, Hernán Montenegro había dicho en 2016 que: “Chorear es malo siempre. Ser chorro es penoso pero en el peor se los casos, tené estilo. Y este ni estilo, grasa. Se afanó 50 millones de mangos”, contó en aquella ocasión.
Los actos “infieles” de Vaccaro
–En la primera maniobra advertida el entonces presidente habría comercializado personalmente entre 35 y 45 paquetes de entradas a los partidos que la Selección Argentina iba a disputar en el mundial de básquet realizado en España. En ese sentido, “se logró acreditar” que el dinero de esas ventas se canalizó a través de “las cuentas personales y/o en cuentas de sociedades vinculadas” con Vaccaro, como es el caso de la sociedad “JUSANJU S.A.”. En otro de los casos, se determinó “que existieron paquetes que fueron vendidos y pagados con dinero en efectivo a Vaccaro, o a alguna otra persona de su entorno, entregándosele al comprador recibo oficial de la CABB, pero ese dinero recaudado -que asciende a la suma de $ 450.000,00- nunca fue ingresado en su totalidad al patrimonio”.
– El 24 de abril de 2014 la Federación Española de Baloncesto transfirió 20 mil euros, suma que había sido acordada con Vaccaro para cubrir los gastos de viaje del seleccionado argentino; sin embargo, ese monto fue depositado en una cuenta del HSBC Bank con sede en Hong Kong a nombre de la empresa “Wai Ho Trading (Hong Kong) Company Limited”, a pedido del propio Vaccaro. Por supuesto que la cuenta no tenía nada que ver con el Básquet.
– La Federación de Capital le dio a CABB cinco cheques por 200.000 pesos cada uno ($1.000.000) por los la inscripción de sus jugadores federados del 2014, como pagan todas las provincias. A la CABB ingresaron solo 3. Nadie sabe qué pasó con los otros dos.
– Dentro de las deudas que encontraron en la primera auditoría interna, estaba una financiera (cueva) del microcentro porteño. La deuda era (es) de 3.750.000 pesos. Se pidió dinero prestado y luego de fueron pagando sólo intereses con cheques de la CABB. Nadie sabe donde está ese dinero, tampoco quien fuera el tesorero en aquel tiempo, el formoseño Gerardo Montoya
– Otro acreedor especial que apareció en la auditoría fue Rubén Labarere, presidente de la Federación de La Pampa, que a su vez es dueño de una “financiera”, que también le había cambiado cheques a CABB.
– La CABB cobró por adelantado la totalidad de lo acordado para el 2014 con Proenter (empresa que comercializa a la Selección), como así también la totalidad del proporcional del sueldo del entrenador del seleccionado (porquel entonces Julio Lamas), que paga esa misma empresa. Aunque Lamas no cobró un centavo en su momento.
Datos sobre la auditoría gentileza Básquet Plus