El partido entre Gimnasia y Atlético Tucumán se terminaba, corrían 4 de los 5 minutos adicionados por el árbitro Hernán Mastrángelo, hasta que luego de una infracción sobre Matías Melluso en el borde del área a la que llegó empujando desde abajo, Brahian Alemán marcó de tiro libre en la última jugada del encuentro.
Con su gol, Gimnasia cambió la historia de lo que había sido la derrota ante Defensa y Justicia en Florencio Varela, la cual también se había consumado con la última jugada del partido. Sin embargo, la nota de la tarde tuvo que ver más con la celebración de Alemán en el gol y la aparición del capitán Matías Melluso en la misma, más que en su ejecución.
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Una vez que la pelota entró al arco luego de haber pasado la barrera con efecto, y de haber pegado en la parte interna del palo derecho de Cristian Lucchetti, Alemán se dio vuelta y comenzó la historia personal con los hinchas de Gimnasia: primero hizo un gesto con las manos para que cierren la boca, y luego se tapó los oídos.
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En el medio de esa historia, mientras que Alemán regresaba hacia la mitad de la cancha, apareció Melluso, quien se puso de frente a él e intentó bajarle los brazos para que deje de hacerle esos gestos a los hinchas que lo estaban mirando por televisión, pero finalmente no tuvo el efecto deseado por Melluso.
El futbolista uruguayo no depuso su actitud tal cual le pidió Matías Melluso y continuó con su festejo, el cual justificó luego del duelo ante Atlético Tucumán en diálogo con el Programa “Paso a Paso” que se emite por TyC Sports: “Últimamente se están diciendo muchas cosas que no son ciertas, muchas cosas que a uno lo lastiman y molestan. Sufre uno y sufre la familia. En vez de preguntar o ver qué pasó, la gente habla. Le gusta hablar y meter cizaña”.
Esto tiene que ver con que continuamente se viene hablando de su salida de Gimnasia, y muchas veces queda en el ojo de la tormenta de los hinchas y es apuntado por sus rendimientos, más relacionados con lo actitudinal que lo futbolístico. Además, fue muy cuestionado tras los hechos de pretemporada que lo tuvieron involucrado en el ritual de bienvenida a primera para los juveniles, en el cual fue uno de los que se excedió en su proceder, por el cual tuvo que pedir disculpas.
La camiseta 10 de Gimnasia
Como si esto fuera poco, además la historia entre Alemán y los hinchas de Gimnasia sumó un nuevo capítulo con la llegada de Luis Miguel Rodríguez al Lobo y la camiseta número 10, con la cual fue anunciado el Pulga y hasta salió a la venta. Sin embargo, el delantero utiliza la número 8.
Mucho se conjeturó acerca de que Alemán nunca quiso cederle el número, pero ayer explicó: “Todo lo que pasó con el tema del Pulga fue todo un malentendido, nunca nadie vino a decirme nada, ni dirigente ni el mismo Pulga a pedirme la camiseta, asique la sigo teniendo yo”.
El delantero también fue consultado acerca de esta situación, y abordó el tema con muchísima tranquilidad, restándole importancia: “Por respeto a él elegí otro número, no pasa nada con el número, el tema es poder jugar”.
