Se dirá que la Copa Argentina es así, que ya tiene varios batacazos, que todo puede pasar. Pero hay situaciones en las que un equipo de Primera, campeón, y con los mejores refuerzos del mercado, no puede permitir. La crónica de los hechos dirá que Estudiantes sigue en la Copa Argentina, que le ganó 2 a 1 a Sarmiento de La Banda, que ya está en los 16avos del final. Pero también mencionará que estuvo a nada del papelón ante un rival del Federal A. De llevar una serie que tenía controlada a los penales y de volver a dejar una de esas manchas que quedan en la historia.
El Pincha lo ganó con diez, pero esta vez no hay lugar para destacar la heroica, como pasó con Central Córdoba tras revertir el 2-0 por la Liga. Porque la expulsión de Cetré tampoco puede permitirse. Y menos, en un partido así. Con el 1-1, el colombiano hizo una falta infantil, se ganó la segunda amarilla y dejó con uno menos al equipo cuando más lo necesitaba.
En ese contexto, los pibes terminaron salvando al equipo de una noche para el olvido. Primero fue Tobio Burgos, que marcó el 1-0 de tiro libre en el primer tiempo, cuando el equipo ya jugaba mal. Y sobre el final, sobre la hora, a los 90, fue Fabricio Pérez, el juvenil que había entrado un rato antes, el que terminó marcando el 2-1 final, evitando que la serie vaya a los penales.
Será un partido que, más allá de la clasificación, le servirá a Domínguez para replantear varias situaciones. Porque el DT cambió medio equipo y no le respondió. Es más, para el segundo tiempo entraron Ascacibar, Neves y Sosa. Sin embargo, nada fue muy diferente. Y con ellos, en cancha, Sarmiento La Banda lo terminó empatando.
Sobre el final, Fabricio Pérez definió muy bien una pelota en el área y le dio alivio al Pincha, que sigue en la Copa Argentina, pero tiene poco que festejar después de una flojísima actuación.