Nada será igual entre Argentina y Países Bajos después de lo ocurrido en los cuartos de final del Mundial Qatar 2022 que conquistó la Selección Argentina conducida por Lionel Scaloni en el banco y con Lionel Messi como estandarte dentro de la cancha.
La historia entre ambos no era nueva, pero, pese a que disputaron la final del mundo en 1978, este quiebre en estadio Lusail no hace más que potenciar la riña que había tenido lugar en 1998 cuando un cabezazo de Ariel Ortega a Edwin van der Sar, un hecho violento aislado que se terminó con la roja del árbitro.
Sin embargo, los cuartos de final traían consigo a “la madre de las batallas” entre ambos países. Argentina empezó escondiendo el esquema y nombres ya que Rodrigo De Paul tenía una lesión que lo hizo pensar en la posibilidad de quedarse sin Mundial. Las mañas a las que están acostumbrados los cronistas hicieron pensar una “estrategia” del cuerpo técnico para ocultar el esquema, pero la situación era realmente complicada.
Por parte de Países Bajos y más precisamente de su entrenador, Louis Van Gaal, llegaron los condimentos que necesitaba el juego para que se ponga picante. “Messi No juega mucho con el rival cuando el rival tiene la posesión del balón. Ahí es también donde están nuestras posibilidades” y el “si llegamos a los penales tendremos ventaja” fueron suficientes para encender al capitán que había sido acusado de “no tocar la pelota” en el partido entre ambos en 2014.
Después, cuando el partido comenzó, lo ocurrido fue demasiado para poder retenerlo con claridad. El majestuoso pase del rosarino entre las piernas de Aké para que Molina marque el primero.
Nahuel Molina marcó el primer gol en la Selección Argentina ante Países Bajos en el Mundial Qatar 2022
De Paul dejaría la cancha fundido para que Leandro Paredes de una Masterclass de como juega un volante central moderno y unos minutos más tarde, a 18 del final. La falta contra Acuña que Messi cambia por gol y celebra con Topo Gigio incluido contra el banco visitante. Lejos de rendirse, Van Gaal se pone a la altura y manda a la cancha a Wout Weghorst que, a 8 del final, descontaba para la Naranja Mecánica.
Pocos minutos después el partido se rompió. Una fuerte entrada entre Aké y Paredes deriva en falta y el ex Boca suelta un pelotazo contra el banco de Países Bajos que desata una gresca entre ambos planteles. Jugadores por los aires, golpes, insultos y un clima picado para un juego que Argentina había tenido en el bolsillo.
En el minuto 100, el árbitro cobra una falta en la puerta del área y una jugada preparada termina con Weghorst poniendo el 2 a 2 y llevando el partido al alargue. La decepción era total. En el alargue Lautaro tuvo la suya y a un minuto de los penales, con la Selección dominando a su rival en cada aspecto, el palo le negaba la chance a Enzo Fernández.
En los penales apareció lo mejor (hasta ahí) de Dibu Martínez. Dos penales atajados, control de la situación y un shock de confianza para un equipo que lidiaba con las provocaciones del rival en la mitad de la cancha. El nacido en Mar del Plata sería el primero en insultar abiertamente a los holandeses: “dos veces te coj…a vos, dos veces“, se fue gritando el arquero que en un par de años ganó todo con la albiceleste.
El final fue soñado para Lautaro que, de perder el puesto con Julián Álvarez, pasaba a tener en sus pies el pase a la semifinal con Croacia. El arquero Noopert intentó intimidarlo, pero el bahiense lo miró a los ojos y le mostró la pelota como diciendo “mirala ahora, porque no la ves más”. Martínez cumplió su parte y el resto recorrió el mundo.
Los argentinos burlándose de los abatidos rivales mientras buscaban al Toro y a Dibu que a lo lejos caían en llanto frente a los miles que veían lo que estaba por venir. Cuando todo parecía que terminaba ahí en la zona de vestuarios, donde la prensa hablaba con los jugadores Messi observó que el gigante Weghorst lo observaba enfadado a unos metros.
La respuesta de Messi no solo recorrió el mundo, sino que se volvió icónica. El “que mirás bobo, anda pá allá bobo” (del que luego se arrepintió) fue la escena final de una película de héroes y villanos que tal como dijo Scaloni después “ jugaron el partido como se debía jugar el partido y nada más que eso”. Cine.
Lionel Messi reaccionó ante la victoria de la Selección Argentina ante Países Bajos en el Mundial Qatar 2022