El regreso de Mauro Boselli a Estudiantes le planteó un lindo problema a Ricardo Zielinski, quien tenía en Leandro Díaz y Gustavo Del Prete una dupla aceitada y con confianza en la delantera Albirroja. La decisión del DT fue juntarlos a los tres, pero todo indica que eso no se sostendrá en el tiempo.
Si bien entre ellos se entendieron de buena manera en los cuatro partidos que se disputaron hasta el momento en este 2022, el que no termina de encontrar la manera de acoplarse al juego con los tres atacantes en cancha es el resto del equipo, que por momentos se vio descompensando y sin sorpresa por las bandas.
Zielinski optó por no prescindir de ninguno de los tres, en vistas del gran rendimiento de Boselli, de que Díaz viene derecho y de que Del Prete es quien marca la diferencia. Sin embargo para que jueguen juntos el DT de Estudiantes debió recostar a Tuti por izquierda y no solo lo siente él desde lo físico sino también el equipo.
Con Lomónaco en Abasto, cómo está la pelea en la delantera de Gimnasia
Gimnasia sumó este miércoles a Sebastián Lomónaco de manera oficial. El ex Godoy Cruz llevó a cabo su primera práctica y buscará ganarse un lugar en la consideración de Orfila.
Tanto en lo defensivo, en donde Emmanuel Mas por momentos quedó muy solo, tanto como en el ataque por las bandas (un fuerte del equipo del Ruso en 2021) el equipo tuvo algunas dificultades que se acentuaron en el duelo ante Audax Italiano. Por este motivo el entrenador evalúa que uno de los tres deje el equipo.
La mejor versión del Pincha, casualidad o no, se vio justamente en el partido frente a Lanús en el que Boselli y Del Prete fueron titulares mientras que Díaz ingresó fresco en la segunda parte para fajarse con los defensores rivales. Allí Tuti está más cerca del arco, que es donde hace la diferencia, y no está obligado a realizar un recorrido y un desgaste físico tan importante.
Además con el Loco en el banco Zielinski y Estudiantes se aseguran una opción de peso y jerarquía en el banco en caso de tener la necesidad de revolucionar el ataque. Si juegan los tres juntos a la hora de los cambios no tiene variantes revulsivas a disposición para afrontar la segunda mitad.
