Estudiantes está a días de vivir una nueva Asamblea que marcará un hecho inédito ya que se celebrará en UNO y en la cual Juan Sebastián Verón dejará de ser presidente para ser sucedido por Martín Gorostegui.
A más de seis años de su primer día como dirigentes del Pincha, Verón y Gorostegui hablaron en Acá hay una escuela en La Cielo y revivieron sus experiencias, recordaron lo mal que la pasaron al inicio y destacaron lo que quieren con la próxima gestión.
“El camino que hizo esta comisión directiva, con cambios en el medio, fue todo un aprendizaje para la gran mayoría. Sin experiencia y en un club difícil. Teníamos muchas situaciones complejas en el funcionamiento”, empezó diciendo Juan Sebastián Verón al ser consultado por su inicio en la política del club.
Y agregó: “llegamos pensando en hacer canchas y nos encontramos con la realidad del club. Eso nos fue dando experiencia y empezamos a ver cómo se mueve la CD, cómo se van acomodando, quién sin pedir hace y todo eso hace al conocimiento”.
Ante esa situación, Martín Gorostegui fue más allá y recordó: “agradezco y resalto lo que dice Sebastián de lo que hicimos. Pero yo hoy no puedo creer lo que hicimos con el estadio y que lo hayamos terminado”.
“Cuando entramos ni siquiera era rascar la olla, porque no había olla. No había un peso. No teníamos un club amigable para el sector financiero. Cada día que pasaba y la obra no tenía el impulso que queríamos y que haya pasado poco tiempo para terminarlo habla de la marca que hizo esta Comisión Directiva en la historia del club”, explicó en detalle Gorostegui rememorando seis años de gestión.
Verón deja la presidencia y seguirá como vicepresidente primero. Será uno de los principales compañeros con los que contará Martín Gorostegui desde el próximo sábado. Al hablar de la experiencia en la presidencia, la Brujita contó: “ ser presidente fue tremendo. Al principio no sabes para donde salir porque el club funcionaba con libreta y lapicera y un estadio que no tenía nada, solo bloques de cemento. Se hablaba mucho, pero no había papeles”.
Y agregó: “teníamos deudas, el club funcionaba mal y el fútbol es una pantalla muy fuerte porque lo que ves dentro de la cancha te queda en la retina y eso te queda. El detrás de eso era muy difícil. El laburo que se hizo en estos seis años, no lo digo para adjudicarme, porque lo digo como grupo de trabajo, lo que hicimos fue enorme y genial”.
Respecto del cambio en los cargos, Verón explicó: “siempre confié, como lo hacía en la cancha, en la gente que tenía al lado. Me apoyaba en ellos y ponía lo mío, ideas y objetivos. Con la gran mayoría, y en este caso con Martín a quien no lo conocía, me fue pasando eso, nos conocimos al andar y tenemos empatía”.
“Es un cargo, me corro, hay una continuidad de la idea y con otra impronta que me encanta. Pero es lo mismo y seguiremos haciendo de la misma manera. A mi no me cambia el cargo”, concluyó la Brujita Verón.