Gabriel Neves no se encuadra dentro del estereotipo del jugador de fútbol. Tiene más bien la apariencia de un artista. Tal vez el preconcepto nace a partir de sus constantes publicaciones en su Instagram, donde publicaciones muy particulares con una fuerte inclinación por la fotografía con una antigua cámara.
Más allá de las valoraciones artísticas, el jugador se ha transformado en el cerebro de Estudiantes. “La verdad es que empezamos muy bien el año. Ahora debemos trabajar en transformar estos partidos en una buena temporada”, afirmó en Radio Carve de Uruguay.
El jugador se mostró confiado n seguir adelante con su adaptación al futbol argentino, que es más difícil que otros en lo que jugó: “Me costó un poco la adaptación al fútbol argentino, es muy directo, se ataca un montón y se piensa un poco menos. Me costó el tiempo en Independiente, el club estaba pasando por un tiempo difícil”.
Verón y Domínguez, las claves de su llegada
Para Neves jugar en Estudiantes es un salto en su carrera. “Cuando llegué a Estudiantes de La Plata hay un montón de palabras que definen al club y te lo hacen saber, la mística, que es una familia y muchas cosas que se pregonan en Estudiantes”, explicó. Además, sostuvo que la presencia de Verón es una motivación extra para los jugadores, al ver una figura tan representativa en City Bell: “Verón está muy presente, siempre está en la vuelta en el club. Desde que llegó está intentando que el club crezca un montón. Conmigo habló un poco el año pasado cuando llegué. Siempre está a disposición”
El uruguayo también se refirió a la importancia que tuvo Eduardo Domínguez para elegir jugar en Estudiantes: “A Eduardo (Domínguez) lo tuve en Nacional y me gusta mucho su forma de entrenar y de jugar. Cuando sale de Nacional se comunicó conmigo en cada equipo que estuvo y por una cosa o por otra nunca se pudo dar, me había llamado para Colon e Independiente. Se dio lo de Estudiantes y fu el momento perfecto porque intenta sacar lo mejor de cada uno”.
La rivalidad con Peñarol
Neves jugó en Nacional y, además es hincha. Sabido es que las hinchadas de Estudiantes y Peñarol son amigas y eso al uruguayo no le hace mucha gracia. “A veces para mi es difícil, estoy jugando y en la tribuna ves camisetas de Peñarol. Es algo más de hinchadas y de ellos, así que me mantengo por fuera un poco de eso. En el futuro me gustaría volver bien y jugar en Nacional, pero estoy disfrutando de este momento”, expresó.
Por último el jugador hizo una pequeña referencia a la posible convocatoria por parte de Marcelo Bielsa para jugar por la selección uruguaya: “Por ahora nadie se ha comunicado de la selección conmigo. Prefiero concentrarme en el momento y aprovecharlo, tuve muchos altibajos y no conseguía una regularidad así. El sueño está”.