Más allá de la enorme victoria que Gimnasia consiguió el jueves último ante Godoy Cruz en Mendoza, la fecha fue excelente para el equipo de Orfila que, a fuerza de buenos resultados y caídas ajenas, empieza a ilusionarse con dejar atrás la pelea por la permanencia lo más rápido posible.
El Lobo había arrancado apretado el campeonato y la derrota ante Instituto sembró nubarrones por las dudas que genera una caída ante un rival directo con el aditamento de haber jugado horrible.
Sin embargo, el empate ante San Lorenzo y las sólidas victorias ante Independiente y Godoy Cruz hicieron que el humor cambie radicalmente y el equipo tome un poco de aire en la tabla que marcará cuáles serán los equipos que bajarán a segunda en el final del año.
Los rivales, en caída libre
De la casi decena de equipo que pelea por no descender el que peor está es San Martín de San Juan, que está virtualmente descendido. Está último en la tabla general y en la de los promedios, por lo que su salvación depende de un milagro.
Si el torneo culminase hoy, deberían jugar un desempate Tallres y Aldosivi, ambos con 17 puntos. La T perdió ante Lanús con el gol que marcó Rodrigo Castillo y el Tiburón fue víctima de Barracas, que le ganó 3 a 1 con polémica.
Banfield, el equipo de Pedro Troglio perdió 2 a 1 ante Belgrano y se quedó en 18 y con 19 aparecen Vélez y Unión, que también perdieron: el equipo de los Mellizos 1 a 0 ante San Lorenzo y el de Madelón también por la mínima ante Argentinos, con un golazo de Alan Lescano.
Más arriba, con 20 aparecen Godoy Cruz (que perdió con el Lobo) y Sarmiento, que de la mano de Sava ganó en San Juan 1 a 0. Y con 21 está ATU que fue víctima del homenaje permanente a Ángel Di María y no pudo pasar del empate.
Así planteadas las cosas, el Lobo tiene nueve equipos por debajo en la pelea por quedarse en la élite del futbol nacional. Un número para nada descartable si tomamos en cuenta cómo empezó el torneo.