El partido del Pincha terminó ayer cerca de las 19 horas, y el cuerpo técnico decidió que el plantel permanezca en la ciudad de Mendoza pero, sin embargo, hubo un jugador que no cumplió con eso y debió volverse de manera inmediata.
Se trató de Diego Vera, quien se fue rápidamente del estadio rumbo hacia el aeropuerto, para poder viajar a Buenos Aires lo más rápido posible y luego emprender un nuevo vuelo esta vez hacia Montevideo.
Sucede que su hijo será operado durante la jornada de hoy en dicha ciudad, y por ese motivo el cuerpo técnico lo licenció para que pueda presentarse en tierras uruguayas para acompañar a su familia.
Antes, el punta había jugado los noventa minutos frente al Tomba en Mendoza, y si bien no había podido convertir si había tenido un buen partido exigiendo a la defensa local.