El destino del fútbol argentino parece seguir lejos de la organización y de la previsibilidad más allá del contexto de pandemia que ha alterado todas y cada una de las agendas deportivas. Aún ha sabiendas de que los partidos amistosos volverán este fin de semana y que la idea es que el fútbol vuelva en octubre, desde la Liga Profesional de Fútbol (LPF) presidida por Marcelo Tinelli no hay certeza alguna de cómo se jugará el nuevo torneo.
Es por eso que, al día de la fecha, todo se maneja por trascendidos y, pese al enojo de Tinelli por la filtración de los borradores, todo indica que la reanudación de la competencia local sería en aquellos parámetros que determinaban el armado de 6 grupos (con sus correspondientes cabezas de serie) de cuatro equipos y dos copas en juego, una con el nombre del sponsor principal (2 grupos con los 6 primeros equipos) y otra con el sponsor secundario.
Aquella determinación de poner cabezas de grupo en este nuevo torneo que viene dejó afuera de esa consideración a Huracán lo cual generó un enorme fastidio en Parque Patricios, por lo que se originó un fuerte debate teniendo en cuenta que Marcelo Tinelli, es reconocido hincha de San Lorenzo el clásico del quemero.
Ante el silencio de la LPF el Globo cambio la estrategia y dejó de lado las declaraciones mediáticas para presentar un nuevo formato con variables clave: Clásicos por doquier y méritos por títulos nacionales.
Mientras se ultiman detalles para confirmar el formato propuesto oficialmente, el Globo envió el suyo, tal como lo había hecho Talleres que propuso una Liga Profesional con no más de 22 equipos, partidos ida y vuelta, descensos y dos partidos por televisión abierta.
El nuevo torneo que propone Huracán
Desde Parque Patricios proponen una ronda inicial de tres grupos de ocho equipos, jugando todos contra todos a un solo partido. Los cuatro mejores de cada zona avanzan a la Zona Libertadores y los cuatro peores a la Zona Repechaje, quedando una segunda ronda de dos grupos de seis equipos en cada zona, jugando también todos contra todos.
Los ganadores de cada zona disputan una final, el de la Zona Libertadores es el campeón y clasifica a la Copa 2021, el de la Zona Repechaje juega una final con el perdedor de la otra final por un lugar en la Sudamericana del año próximo.
Los clásicos y la televisación
Los clásicos rivales comparten grupo, y el resto de los equipos se empareja por geografía. Y para ordenar los emparejamientos evitando que los más fuertes compartan grupo, se suman los títulos oficiales -solamente los nacionales de AFA- de la pareja en cuestión: las tres primeras son River y Boca (Grupo A), Racing e Independiente (B) y San Lorenzo y Huracán (C), por lo que irían a tres grupos distintos. Los tres que le siguen son Central-Newell’s (C), Vélez-Argentinos -definido por cercanía- (B) y Estudiantes-Gimnasia (A).
Claro que allí podrían aparecer tanto oposición de los dirigentes que no quieren disputar clásicos de más, y de aquellos que se sentirían claramente perjudicados como los platenses, condenados a enfrentarse a Boca y a River.