La noticia corrió rápido. Sin embargo, por el peso del apellido, por ser el hijo del máximo ídolo, generó una expectativa que no va de la mano con la realidad. Nicolás Barros Schelotto, el hijo de Guillermo, no jugará en Gimnasia. No, al menos, por ahora. De hecho, tiene vínculo con el equipo B de Los Ángeles Galaxy por un año más y el 23/1 debe volver a presentarse en su club.
Es cierto, sí, que el volante de 18 años, de muy buen físico, se entrena con la Reserva de Gimnasia. Pero hoy es sólo una situación pasajera, mientras pasa unos días en el país. Nicolás, categoría 2006, viene de hacer una prueba en Sevilla, donde estuvo cerca de ser fichado.
Nieto del recordado Hugo Barros Schelotto (ex médico del plantel y presidente del club), hijo de Guillermo, sobrino de Gustavo y primo de Bautista (todavía en el Lobo mientras negocia su salida a Platense), estará estos días entrenándose en Estancia pero sólo podría seguir en Gimnasia en el caso de que el club le haga una oferta para volver.
Es decir, al tener vínculo con el equipo B de Los Ángeles Galaxy y tener que volver para sumarse a la pretemporada, sólo podría ser fichado en Gimnasia si hay una propuesta para el jugador, que eventualmente debería negociar su salida con su actual club, que su papá dirigió en la MLS.
Volante zurdo, de buena técnica y porte
A diferencia de su padre, Nicolás es zurdo. Por eso, en el campo de juego está más cerca de su tío Gustavo, ya que quienes lo vieron jugar definen al juvenil como un mediocampista de gran técnica, muy inteligente con pelota en los pies, además de contar con un buen porte físico.
En sus años en los Estados Unidos causó buenas sensaciones y fue visto como una de las promesas en su posición. De hecho, en 2022 hasta fue citado a la Sub 17 de la selección de ese país. Y en el 2023 se consagró campeón de la MLS Pro Sub 17.
El juvenil de 18 años entrenará con la Reserva dirigida por Fernando Zaniratto hasta el 20, cuando emprenderá el regreso a Estados Unidos.
Su vínculo con Gimnasia
Nicolás Barros Schelotto estuvo en Gimnasia hasta el 2020, cuando la familia emigró a USA por el trabajo de su padre al frente de Los Ángeles Galaxy en la Major League Soccer. Entonces, Nicolás cambió El Bosquecito por la Ciudad de los sueños, dejando la cinta de capitán de su categoría.