Un joven rugbier que orinaba en un árbol, a escasos metros de los baños públicos y a la vista de todos, desató una violenta pelea a golpes de puño en la Isla Jordán en Rio Negro.
El deportista denunciado es un adolescente de 17 años que compartía un asado con otros familiares.
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El encargado, conocido como “Camacho” , se acercó al joven y le dijo: “Cómo vas a mear ahí, si están los baños para eso”. Pero el adolescente no hizo caso a la advertencia .
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La respuesta fue que no iba a los baños porque estaban sucios.
Luego le ordenó al trabajador que se alejara porque podía estar infectado.
Así consta en la denuncia que radicó más tarde el encargado del lugar de apellido Camacho, en donde relata además una pelea ocurrida durante el fin de semana largo.
Dentro de la exposición ante autoridades policiales, también denunció la catarata de insultos que el rugbier lanzó hacia él.
“Negro” y “boliviano” fueron las expresiones que utilizó el muchacho para agredirlo de palabra.
Por estas circunstancias el damnificado se dirigió a la vecina ciudad de Neuquén capital, para realizar otra denuncia. En este caso por discriminación ante el Inadi, que a pesar de ubicarse en jurisdicción de otra provincia, es la delegación más cercana a donde se produjeron los hechos.
“El chico se desubicó totalmente. Encima la mamá es docente. Con más razón no debería haber hecho lo que hizo. Empezó a los insultos y luego me tacleó” fue lo que comentó Camacho, a un medio de la ciudad de Cipolletti.
Dijo que el menor es rugbier y se le abalanzó para golpearlo; tras lo cual se defendió también a golpes de puño.
Otros familiares del deportista se sumaron a la pelea y comenzaron a agredirlo. Mencionó que la madre y la abuela del menor lo rasguñaron en los brazos y volvieron a insultarlo, diciéndole que era un “negro” y un “boliviano”.
En la denuncia específica que el joven le arrojó piedras, pero no lograron impactar en du humanidad, pero que provocaron daños materiales en vehículos estacionados.
Todo terminó con denuncias cruzadas en la comisaría a las que deberán sumarse la realizada en el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo, donde Camacho fue a dejar constancia de los agravios que manifestó haber sufrido.
La policía del lugar indicó que se inició un legajo judicial caratulado como “lesiones recíprocas”, porque así como Camacho denunció al joven por orinar a la vista de todos y agredirlo, el comisario advirtió que el muchacho también realizó una exposición contra el cuidador luego de la pelea.
En su denuncia, explicó que los baños a los que debe mantener en buen estado Camacho, no estaban en condiciones y, por ese motivo, decidió hacer sus necesidades fuera del recinto.
“Por ese entredicho, se originó una discusión que se torno acalorada hasta que llegaron a los golpes de puño. Cuando avisaron al destacamento, la pelea ya había terminado y se lo convocó a que radiquen la denuncia en sede policial”, informó el oficial a cargo.
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