El argentino es creatividad pura en estado de ebullición permanente. Y una de las maneras de demostrarlo es al momento de “bautizar” negocios familiares en cualquier rincón de la geografía nacional. Por supuesto, el conurbano siempre es una fuente de inventiva y originalidad única que sorprende con sus inimaginables nombres alusivos a artistas, grupos musicales, festivales o frases célebres.
El “Kevin Bacongate” que tuvo lugar durante la semana en un programa de “Late Night Show” de la televisión estadounidense, despertó la curiosidad de muchos, y también otros se sumaron para dar a conocer el negocio de su barrio con nombres uno más llamativo que el otro.
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El actor norteamericano fue puesto en conocimiento de la existencia de una hamburguesería que en nuestro país llevaba su nombre sin autorización de él.
Fue el famoso conductor de TV Jimmy Kimmel quien se lo mostró, y en un tono que no se interpretó del todo si fue de enojo o en sorna, el actor de “Footloose” dijo que “llamaría a sus abogados” por esa situación que involucraba a ese negocio en Argentina.
A partir de allí, las redes sociales se inundaron de comentarios, algunos criticando al actor debido a su supuesto enojo por la utilización de su nombre de un pequeño comercio en un lugar remoto.
Otros apoyaron el hecho de que el actor se hubiera enfadado porque utilizaron su imagen sin autorización, y algunos le enrostraron que ante una situación similar de hace unos años, Paul Mc Cartney se había hecho eco de modo humorístico de la existencia en Córdoba de una carnicería que utilizaba una denominación muy similar a la suya… porque se llamaba Paul Mc Carne.
CATARATA DE NOMBRES IMAGINATIVOS
Otra de las derivaciones del “Escándalo Kevin Panceta” (como podria traducirse el “Kevin Bacongate”), fue que comenzaran a viralizarse fotografías del frente de negocios cuyos nombres dejaron riendo y sorprendidos a varios, no sólo por la originalidad, sino muchas veces también por la osadía en la nomenclatura.
Después de la viralizada sorpresa del actor norteamericano Kevin Bacon, al enterarse en vivo, de que una hamburguesería argentina llevaba su nombre, comenzaron a circular otras denominaciones creativas de negocios argentinos
Desde una verduleria llamada “La Fruta Ama“, hasta un hotel alojamiento cuyo nombre es “Rapid Inn“, o los sandwiches de miga “Migadeth“, pasando por la Horma de queso “Cotroco“, la bolsa de Hielo “Submarine“, o la heladería “Helado Oscuro“, decenas de negocios y marcas hoy recorren el ciberespacio, demostrando que los argentinos además de quejosos, y soberbios, también podemos ser apuntados como creativos al inventar títulos “gancho” para emprendimientos.
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