Qué es la enfermedad de Kawasaki, un trastorno muy común en bebés y niños

Este viernes 26 de enero es el Día Mundial de la Enfermedad de Kawasaki, una fecha que pretende visibilizar sobre este síndrome raro que, en la actualidad, se trata de la primera causa de cardiopatía adquirida en bebés y niños pequeños. Conocé cómo es y los síntomas a los que prestar atención.

La enfermedad de Kawasaki causa en los niños hinchazón en las paredes de los vasos sanguíneos de tamaño pequeño a mediano que trasportan la sangre por todo el cuerpo. Anteriormente se la denominaba "síndrome de los ganglios linfáticos mucocutáneos" porque también provoca la hinchazón de los ganglios y de las membranas mucosas dentro de la boca, la nariz, los ojos y la garganta.

Aunque es una enfermedad potencialmente mortal, es tratable. Entre el 25 y 30 % de los niños que no son tratados a tiempo, sufren graves secuelas cardíacas; mientras que la mayoría de los niños se recupera sin presentar problemas graves, en caso de recibir tratamiento en los 10 días posteriores a la aparición.

Aunque la causa aun no se conoce, hay factores que aumentan el riesgo. Por ejemplo: los menores de 5 años son los que tienen mayor riesgo y, a su vez, los niños son un poco más propensos que las niñas de tener la enfermedad de Kawasaki.

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Síntomas de la enfermedad de Kawasaki

Según la Clínica Mayo, para que se diagnostique la enfermedad de Kawasaki, los niños generalmente deben presentar fiebre superior a 102,2 °F (39 °C) durante cinco días o más, y al menos cuatro de los siguientes síntomas:

• Sarpullido en la parte principal del cuerpo o en la zona genital.
• Agrandamiento de un ganglio linfático del cuello.
• Ojos extremadamente rojos sin una secreción espesa.
• Labios rojos, secos y agrietados.
• Lengua extremadamente roja e hinchada.
• Piel roja e hinchada en las palmas de las manos y en las plantas de los pies.
• Descamación de la piel de los dedos de las manos y de los pies
• Dolor abdominal
• Diarrea
• Irritabilidad
• Dolor articular
• Vómitos

Es muy importante que, en caso de que el niño o niña tenga fiebre que dure más de tres días, ir a consultar con un médico. Y es que, el tratamiento de la enfermedad de Kawasaki dentro de los 10 días posteriores a su inicio, puede reducir en gran medida las probabilidades de daño duradero en las arterias coronarias que abastecen al músculo cardíaco.