Los vecinos de Villarino enfrentan un problema verdaderamente insólito. Se trata de los loros barranqueros, unas aves que provocan tantas dificultades para la zona sur, que se han convertido en una pesadilla.
Especialmente en las localidades de Hilario Ascasubi, Pedro Luro y Mayor Buratovich, habitan miles de ejemplares en hospitales y escuelas, donde aseguran que ya no saben cómo contrarrestar el bullicio que generan. En la plaza central de Ascasubi grandes cantidades de excremento salpican sitios por donde pasan a diario chicos y adultos, lo que no sólo conspira contra la higiene, sino también contra la estética del lugar. Lo mismo sucede en el acceso a Pedro Luro.
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Sin embargo, la presencia de estos loros causa un problema aún más grave: provocan cortes de cables de energía eléctrica e internet debido a las bandadas que se posan sobre el tendido, por lo general al atardecer. Esto deriva en interrupciones del servicio en horas de demanda pico para las cooperativas que prestan los servicios.
Los especialistas aseguran que se trata de una invasión. Por ello, representantes de la Agencia de Energías Renovables y Ambiente del Municipio (AERA) solicitaron la “urgente intervención” de la dirección de Fiscalización Agropecuaria, Alimentaria y de los Recursos Naturales de la provincia de Buenos Aires.
La idea es evaluar y poner en marcha un plan de acción eficiente para combatir este problema sin afectar a la especie, con soluciones viables y sustentables para lograr una convivencia armónica con la especie. El municipio consultará también a especialistas e investigadores del área de Biología, Bioquímica y Farmacia de la Universidad Nacional del Sur (UNS), así como a expertos del INTA.
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