El ex arquero de Gimnasia, actualmente en Independiente de Avellaneda, Rodrigo Rey, enfrenta un momento crítico en su vida personal, ajeno al fútbol. Junto a su esposa Laura, denunciaron públicamente que una escuela de gestión privada de City Bell les negó la renovación de matrícula a sus dos hijos, incluido Benicio, quien está dentro del espectro autista (TEA).
La situación fue abordada en una entrevista realizada en el programa ‘Gente Despierta’ de “La Cielo” 103.5, de La Plata, y la interlocutora fue su abogada Carla Junqueira.
En diálogo con los periodistas Martín Strilinsky y Fabián Debesa, la letrada de la familia, explicó que la escuela tomó esta decisión en represalia.
Ahora, como respuesta, la escuela no solo busca excluir al niño, sino también a su hermana mayor, quien no tiene ninguna relación con los hechos denunciados.
“Es una represalia”, aseguró la abogada
La abogada calificó la decisión de la institución como un acto de represalia y destacó que la medida vulnera derechos fundamentales.
A pesar de que la escuela intenta justificar su accionar en una resolución, Junqueira afirmó que esta normativa es inconstitucional y será impugnada. “Llegaremos hasta las últimas consecuencias para revertir esta situación”, aseguró en el programa radial.
Rodrigo Rey, quien tuvo un destacado paso por Gimnasia y Esgrima La Plata antes de llegar a Independiente, también hizo pública su postura en redes sociales.
En un descargo emotivo, señaló la injusticia de la situación y el impacto emocional que esta decisión tiene sobre sus hijos. “Esa bronca de ver que a veces no alcanza con ser buena gente, que defender los derechos de tus hijos molesta a otras personas, al punto de decidir sacarlos de sus espacios y círculos de amigos”, escribió el arquero en sus historias de Instagram.
Lucha por la inclusión
La familia Rey viene denunciando desde hace tiempo que la escuela no brinda las condiciones necesarias para el desarrollo de Benicio, quien logró avances significativos este año gracias a su grupo de amigos.
Según Rodrigo, esta red de apoyo permitió reducir las terapias semanales de su hijo de cinco a tres. Sin embargo, la exclusión amenaza con desestabilizar el entorno que tanto beneficio le ha traído.
El llanto de la esposa de Rodrigo Rey por la situación que están atravesando con sus hijos y la escuela
Laura, esposa del arquero, también expresó su dolor en redes sociales: “Sufrir en silencio es una de las cosas más difíciles que nos ha tocado enfrentar. Que Dios y la justicia nos ayude. No damos más”.
Resolución y apoyo
La familia anunció que continuará luchando para revertir la decisión de la escuela y para visibilizar los problemas de inclusión en la educación privada. “Confiamos mucho en Dios y en la justicia”, concluyó Rey, asegurando que no bajarán los brazos en esta batalla.
La situación generó una ola de apoyo en redes sociales, mientras el caso sigue preocupando tanto en la comunidad educativa como en el ámbito deportivo.