La condena de seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos no fue impedimento para que el exintendente de Lincoln, Jorge Fernández, mantuviera su deseo de volver a tomar las riendas del municipio.
A diferencia de Cristina Kirchner, para quien un fallo de iguales características- ambos fueron condenados como integrantes de una Asociación Ilícita- es considerado un acto de “proscripción” impulsado por sectores políticos, judiciales y mediáticos, el dirigente del peronismo linqueño optó por seguir adelante con su precandidura dado que, por ser una condena en primera instancia y contar con el beneficio de la excarcelación, la ley se lo permitía.
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El fallo condenatorio lo conoció el último 7 de julio de 2023, cuando ya se había lanzado como uno de los precandidatos de Unión por la Patria. “Fui tres veces intendente, no me convoca el poder de la municipalidad. Me convoca ver el sufrimiento y el decaimiento de Lincoln en estos años” expresó durante su acto de lanzamiento de campaña, realizado semanas atrás en una unidad básica.
La interna de Unión por la Patria se definió por menos de 300 votos. Jorge Fernández logró el triunfo frente al concejal massista, Bernardo Baccello gracias al respaldo de 4952 electores – a su rival lo votaron 4634 personas- y se convirtió en el segundo dirigente más votado, detrás del actual intendente y su denunciante, Salvador Serenal (UCR).
Lincoln: Un duelo que se reedita tras el fallo judicial
El actual intendente de Lincoln, Salvador Serenal (UCR) también se impuso en las internas de Juntos y se convirtió en el precandidato más votado con 6811 votos. Su espacio cosechó el 43,13% frente al 39,75% de Unión por la Patria, una ventaja que aún no es determinante para asegurarse la continuidad en la gestión (la diferencia quedó en 814 votos).
Fue precisamente Serenal quien denunció a Jorge Fernández al poco tiempo de asumir en el cargo en 2015. Luego de identificar presuntas maniobras de cohecho a partir de la contratación de supuestos “falsos proveedores” entre los años 2009 y 2012, se presentó a la justicia con elementos que fueron considerados suficientes para abrir una instrucción penal preparatoria.
El exintendente fue imputado y permaneció detenido por dos años con prisión preventiva. Tras ser liberado, volvió al ruedo de la política y ganó una interna legislativa en el Frente de Todos que le permitió acceder a una banca de concejal.
Luego fue designado por el ministro de Seguridad de la Nación, Anibal Fernández como titular del Prodeco, un programa nacional de descontaminación, compactación y disposición final de vehículos y tomó licencia en el cuerpo deliberativo.
La causa judicial siguió su curso y llegó a juicio oral. Los pormenores del escándalo se ventilaron en los Tribunales de Junín donde Jorge Fernández llegó imputado junto a otros tres funcionarios. Tras una serie de audiencias, resultó condenado por los delitos de “Asociación ilícita en carácter de miembro en concurso real con defraudaciones a la administración pública en reiteradas oportunidades en concurso ideal con uso de documento falso”.
La jornadas en los Tribunales fueron presenciadas por el intendente denunciante, Salvador Serenal. Al conocer el fallo condenatorio, manifestó que la jornada marcó “un antes y un después en la historia política del Distrito de Lincoln y de la Argentina. No todos los días se condena a un ex intendente. Sin embargo, tenemos la satisfacción de que todo lo que hemos sostenido y denunciado pudo ser probado en la Justicia” expresó en declaraciones publicadas por el sitio Cuarto Político.
“En lo personal, agradezco a todas las personas que me acompañaron en esta cruzada y a los miles de ciudadanos que creyeron en nuestro pedido de justicia. Denunciar en este país no es gratis y eso lo tengo asumido desde el primer día en que me involucré en política” agregó.
Con todas las cartas sobre la mesa, Salvador Serenal y Jorge Fernández se enfrentarán en un mano a mano que definirá al nuevo intendente de Lincoln por los próximos cuatro años.
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